Ocho bomberos le cantan el cumpleaños feliz a un niño para hacerle más llevadero ese día tan especial que ha estropeado el coronavirus. El vídeo, en dos versiones, se puede descargar de la página web del Consorcio de Bomberos de la Provincia de Cádiz (CBPC). Las peticiones a los bomberos para que acudan a felicitar a niños son tan numerosas que resulta imposible atenderlas todas. Así que han buscado una alternativa para que ninguno se quede sin ese servicio tan demandado.

La crisis sanitaria ha trastocado y modificado la actividad de todos. También de los bomberos. Continúan apagando incendios, auxiliando a accidentados en carretera, salvando vidas. Y ahora también luchan contra la pandemia, contra ese fuego silencioso y sin humo. Cantando a los niños para animarlos pero también con un trabajo de prevención fundamental: desinfectando residencias de mayores, centros de salud, farmacias, centros de personas con discapacidad, centros de menores, comedores, albergues y centros de distribución logística. En casi todos los municipios de la provincia de Cádiz.

Bomberos en la Residencia de Menores Santa Beatriz, de Afanas, en El Puerto.

El pasado día 13 de marzo, cuando en Andalucía se contabilizaban únicamente 219 casos de pacientes confirmados y posibles afectados, el CBPC comenzó a implementar un procedimiento de actuación y preventivo para controlar la seguridad de los bomberos y garantizar la continuidad de la prestación de este servicio esencial para la ciudadanía.

De forma paralela, el presidente del CBPC, Francisco Vaca, y el equipo técnico del Consorcio decidieron al inicio de la crisis planificar una forma de apoyar con el servicio y contribuir solidariamente en lo que fuese necesario en la lucha contra la pandemia.

“Nos encontrábamos con una situación nueva y sorpresiva”, explica Vaca, “que complicaba el operativo de bomberos desplegado en la provincia, requería de mayores cantidades de equipos de protección, generaba dudas sobre la posible afectación en caso de contagio del personal operativo y producía incertidumbre sobre el servicio”.

Un bombero desinfecta el centro de salud de Benalup.

Inicialmente, la dirección del Consorcio trabajó en mantener las condiciones de seguridad de los funcionarios mediante el desarrollo de procedimientos preventivos. Eso significaba continuar con el servicio de extinción de incendios y salvamento a pleno rendimiento. El acceso a los parques de bomberos quedó limitado y fueron configurados los distintos turnos que trabajan en cada parque de manera estanca, de modo que se evitasen contactos y posibles contagios. En los cambios de turno y tras las intervenciones, especialmente, fueron establecidas medidas higiénicas y de limpieza y desinfección adicionales.

Fue necesario llevar a cabo gestiones con diversos proveedores para ampliar el estocaje de material de seguridad necesario. “Las previsiones existentes de material de protección habitual resultaban insuficientes”, señala Francisco Vaca, “y hubo que establecer procedimientos de emergencia de adquisición de materiales y equipos, tanto para protección individual como para las intervenciones. Se invirtieron más de 60.000 euros en adquisición de equipos de protección individual, mascarillas filtrantes, semimáscaras con filtros P2, trajes de protección biológica, material desinfectante y el utillaje necesario”.

Labores de desinfección entre actuaciones.

También hubo contactos con los sindicatos para informarles sobre la situación y los mecanismos que se iban a implementar de manera urgente y para comunicarles cualquier modificación o situación que afectara a los trabajadores. “Los sindicatos con representación, CCOO, Csif, el Sindicato Andaluz de Bomberos y el Sindicato de Bomberos de Cádiz, respondieron al llamamiento desde el primer momento con gran profesionalidad y se pusieron a disposición del Consorcio, lo que facilitó la organización para esta situación de alarma”, afirma el presidente del CBPC.

La presidencia y la dirección del Consorcio evaluaron entonces los espacios donde podía ser más útil la intervención de los bomberos y establecieron como prioridad la actuación en residencias de mayores y otros centros de personas dependientes o menores, en centros de salud, en comedores sociales, albergues municipales y otros centros logísticos de distribución de ayuda. Al tiempo, Francisco Vaca acordó con el Colegio de Farmacéuticos de la Provincia de Cádiz un procedimiento de actuación en estos establecimientos.

Sanitarios y bomberos, en el centro de salud de La Merced, en Cádiz.

Las intervenciones comenzaron el pasado 23 de marzo de manera ininterrumpida y las acciones de desinfección ya suman más de un millar en 36 de los 43 municipios consorciados, lo que representa más del 91% de la población de la provincia de Cádiz.

Hasta el pasado 22 de abril, el Consorcio ha contabilizado 262 servicios en residencias de mayores, centros de menores y centros de atención a personas con diversas discapacidades de la provincia de Cádiz. Han sido atendidos más de 100 establecimientos, como los de Afanas, los centros Ansasull, con gran implantación en el Campo de Gibraltar, o la Residencia de Mayores Nuestra Señora de los Remedios de Ubrique, donde se produjo uno de los primeros focos de contagio.

El balance incluye 331 servicios en centros de salud de atención primaria, inicialmente en las poblaciones de menos de 20.000 habitantes, y posteriormente en el área del Campo de Gibraltar y en el cubierto por el Distrito Sanitario de la Bahía de Cádiz.

Bomberos en el centro de salud de Jimena.

Otros puntos sensibles fueron localizados en los espacios habilitados como comedores, centros de distribución de alimentos y albergues municipales, por la presencia continua de personas. En esos lugares, los bomberos realizaron 64 actuaciones: en los albergues municipales de Cádiz (Centro Elcano), Jerez y Sanlúcar, y en comedores y centros logísticos, especialmente en las poblaciones de Jerez, Chiclana y Algeciras.

A todo esto se suma, en coordinación con el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cádiz, la desinfección en las farmacias de las poblaciones de menos de 20.000 habitantes, las que atienden 24 horas y las ubicadas en las inmediaciones de los centros de salud de atención primaria, lo que ha sumado 401 actuaciones.

Los bomberos también colaboran, por otro lado, especialmente en los parques de Algeciras y Cádiz, con el movimiento Coronavirusmakers, formado por personas que de manera totalmente altruista están fabricando pantallas de protección mediante impresión 3D en toda la provincia de Cádiz. El personal del Consorcio desinfecta, monta y reparte estos equipos de protección. Hasta ahora, los bomberos han distrubuido más de 10.000 unidades a lo largo y ancho de toda la provincia entre el colectivo de sanitarios que están en primera línea en la lucha contra el Covid-19 y también entre el resto de personal expuesto a riesgo de contagio porque desarrolla labores esenciales y con exposición al virus.

Bomberos de San Fernando, recuperados tras resultar contagiados.

Entre esos colectivos expuestos al contagio se encuentran precisamente los bomberos y por ello el virus también les ha tocado a ellos. A principios del pasado abril, cuatro bomberos de una misma brigada pertenecientes al parque de San Fernando resultaron contagiados. Dado que el procedimiento preventivo establecido por el Consorcio ya se encontraba implantado (los turnos de trabajo debían ser estancos y se limitaba el contacto entre las distintas brigadas), no fueron detectados nuevos contagios ni síntomas en el resto del personal.

Los cuatro bomberos de San Fernando ya se encuentran recuperados. Pasaron la enfermedad con síntomas leves y no fue necesario hospitalizar a ninguno de ellos.