FCC inicia la maniobra para llevarse los primeros cinco cajones a Brasil

170 personas construyen las piezas del tercer puerto más grande del mundo, el de Açu

El 'Black Marlin' y el cajón 'Marina', durante la maniobra de carga en el dique exento de Isla Verde Exterior.
El 'Black Marlin' y el cajón 'Marina', durante la maniobra de carga en el dique exento de Isla Verde Exterior.
A. Muñoz Algeciras

16 de abril 2013 - 01:00

Marina está ya esperando en el dique exento del puerto de Algeciras a que comience la travesía de 15 días que le llevará a Brasil. En unos días, junto a Gabriela, Carmen, Carolina y Bárbara, viajarán a bordo del Black Marlin con destino a Açu, a unos 315 kilómetros al norte de Río de Janeiro, para iniciar las obras del que aspira a ser el tercer puerto más grande del mundo.

No son ingenieras, sino las cinco primeras piezas de hormigón armado para un muelle de 2.438 metros lineales en Açu Superport. FCC, la compañía española que se adjudicó las obras por 407 millones de euros en diciembre, construye día y noche desde el 9 de enero -a ritmo de uno por semana- los nueve primeros cajones que servirán de base para que, una vez en Brasil, los cajoneros fabriquen los 40 restantes.

FCC comenzó ayer la maniobra para sacar los cinco cajones del muelle Sur de Campamento y colocarlos sobre la cubierta de un buque semisumergible atracado en el dique exento de Isla Verde Exterior. La operativa comenzó alrededor de las 8:30, cuando dos remolcadores, el Sertosa Dieciocho y el Sertosa Veintisiete, comenzaron a tirar del primer cajón de 45 metros de eslora, 24 de manga y 18 de puntal para cruzar la bahía, para lo que emplearon una hora y media, y situarlo junto al Black Marlin, el semisumergible de 217,5 metros de eslora del que ayer sólo se veía proa y popa al sumergirse unos 12 metros para facilitar la carga.

La maniobra con los remolcadores se repitió tres veces ayer y lo hará otras dos veces hoy. Cada cajón pesa 9.871 toneladas y lleva 3.722 metros cúbicos de volumen. Las piezas precisan sobre la cubierta del buque una separación de seguridad de cuatro metros, para lo que se les han colocado defensas del tipo yokohama.

"El cajón se queda en el centro de la cubierta y, tras posicionarlo, el transporte trinca el cajón y lo lleva hacia su proa. Cuando estén colocados los cinco cajones, emergerá y quedarán en seco. Durante un par de días tendrán operaciones de soldadura a la cubierta con unas placas metálicas y, una vez trincados, el barco cruzará el Atlántico hasta Brasil", contó el jefe de obra, Francisco Varo, durante una visita a la zona de carga en la bahía con los medios de comunicación.

Durante esos dos días de trabajo en la bahía previos al viaje deberán asegurarse también de que los cajones no albergan nada de agua para evitar la entrada de especies invasoras en territorio brasileño. El Black Marlin viajará rumbo a Río de Janeiro con los cajones, donde pasará los trámites aduaneros y, una vez resuelto el trámite, unos remolcadores llevarán los cajones hasta Açu.

Mientras, en la dársena de Campamento el cajonero Mar del Aneto comienza a dar forma a Paula, el sexto de los cajones para Brasil. Varo contó que se está trabajando las 24 horas en esta primera fase del proyecto de Açu Superport, con turnos de 50 personas para ir ferrallando conforme va entrando el hormigón en el molde. En total, FCC calcula que se han creado para esta obra unos 170 empleos directos y más de 700 si se cuentan los indirectos.

Cuando las otras cuatro piezas de hormigón estén formados, viajarán en semisumergible junto al Mar del Aneto. Junto al Mar del Enol, que está en Cádiz, los dos cajoneros se situarán al abrigo que provean estos primeros cajones fabricados en San Roque para continuar la obra de este futuro puerto petrolero y minero de Brasil.

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