El consejero delegado de Acerinox, Bernardo Velázquez, ha destacado la importancia del precio de la energía, del coste de la mano de obra y de la eficiencia en la fabricación del acero inoxidable como elementos que marcan la diferencia en el sector durante su intervención, esta semana, en la Cumbre Nacional de la Ingeniería y la Empresa 2019 celebrada en la Fundación Cajasol de Sevilla.

Respecto a la energía, aseguró que si su fábrica de Palmones estuviese en Francia, "la compañía ganaría 30 millones de euros más", por lo que hizo un llamamiento a las administraciones públicas para "rebajar" los costes energéticos.

Velázquez participó en una mesa redonda bajo el título El nuevo horizonte económico y la competitividad de España, junto a Javier Targhetta (Atlantic Copper), Paulino Fernández (Navantia), y Antonio Joyanes (Cepsa).

El directivo explicó que dentro de una empresa industrial como Acerinox "la calidad, el servicio, el diseño de nuevos tipos de acero inoxidable y hasta los equipos de fabricación se han convertido en commodities". "La diferencia a la hora de competir la marcan el precio de la energía, la mano de obra y la eficiencia", recalcó.

En cuanto a la eficiencia, explicó que Acerinox se ha orientado a la búsqueda de una producción "eficiente y con el mayor grado de optimización de procesos posible", enfocándose a la transformación digital "como herramienta para seguir siendo excelentes y flexibles", así como avanzar hacia el objetivo de usar menos recursos, ser más respetuosos con el medioambiente y más sostenibles.

"Han resultado ser pioneros, puesto que cuando los hemos enfocado desde el punto de vista de la transformación digital se ha hecho evidente que todo tenía que ver con lo que hacíamos, lo que revertirá en producción, calidad, rendimientos, excelencia y eficiencia. Con todo ello, hemos desarrollado Excelencia360", explicó.