La Línea

La Línea extenderá 1,5 kilómetros la playa de poniente hasta el antiguo hotel Rocamar

  • La Demarcación de Costas prepara un proyecto para rellenar el litoral con la arena del dragado del puerto de megayates y cruceros

  • La intención es que los trabajos comiencen a lo largo de 2023

La actual playa de poniente, de unos 300 metros de longitud.

La actual playa de poniente, de unos 300 metros de longitud. / Jorge del Águila

La Línea recuperará la playa a lo largo de todo el litoral de poniente que perdió con la construcción de la carretera CA-34 hace más de 30 años. El Ayuntamiento cuenta con un proyecto de la Demarcación de Costas de Andalucía Atlántico para rellenar el espacio actualmente de escolleras entre la actual playa, que cuenta con unos 300 metros, y el antiguo hotel Rocamar, con lo que la playa tendría una longitud de casi un kilómetro y medio. Una previsión muy inicial que el jefe de la Demarcación de Costas, Patricio Poullet, ha trasladado al alcalde, Juan Franco, y a la delegada de Medio Ambiente, Raquel Ñeco, es que las obras puedan comenzar a lo largo de 2023.

Ñeco ha explicado a Europa Sur que el relleno de toda la zona se acometerá con la arena del dragado del puerto de megayates y cruceros y que el proyecto contempla varios espigones en perpendicular a la costa entre los que se harán unas pequeñas calas. “Estamos a la espera de la redacción del proyecto, que lo realizará la Demarcación de Costas. Contará con varios espigones desde el chiringuito La luna hasta el hotel Rocamar. Patricio Poullet, jefe de la Demarcación, nos ha explicado que las obras se podrían comenzar a ejecutar a lo largo de 2023, aunque sin especificar en qué trimestre. Lo que está claro es que la intención es empezar los trabajos el año que viene”, indica la concejal.

El proyecto contempla varios espigones en perpendicular a la costa entre los que se harán unas pequeñas calas

Con este proyecto se recupera la idea original para recuperar la playa de poniente perdida por la construcción de la actual carretera, con dos calzadas y de dos carriles cada una. Históricamente había una playa que cubría todo el litoral oeste del municipio. De hecho, el lugar que ahora ocupan el Aqua, la plaza de Camarón de la Isla y el Club Náutico estaba bañado por el mar. Fue en 1992, hace ahora 30 años, cuando los linenses pudieron volver a disfrutar de este arenal, el más cercano al centro de la ciudad y que suele ser disfrutado por cientos de bañistas.

La única playa de la ciudad que mira a la Bahía, que consta de unos 300 metros, es fruto de la construcción del Puerto de la Atunara. Parte del dragado efectuado en la zona se aprovechó para crear una nueva playa y satisfacer así una gran demanda existente. Gracias a la colaboración entre los distintos organismos (Puerto de la Bahía de Algeciras, el Ayuntamiento de La Línea y la Demarcación de Costas de Andalucía Atlántico) pudo abordarse la ejecución de las obras, consistentes en la construcción de un espigón, el transporte y extendido de 132.000 metros cúbicos de arena.

Los trabajos para recuperar la playa, en junio de 1992. Los trabajos para recuperar la playa, en junio de 1992.

Los trabajos para recuperar la playa, en junio de 1992. / e. s.

El relleno de la actual playa de Poniente comenzó el 5 de junio de 1992. Estaba previsto que la playa se extendiera desde el espigón hasta la altura del colegio Carlos V, con una anchura en la primera zona de 80 metros y de 30 metros en la parte más cercana al centro escolar. Se construyeron tres escaleras a lo largo del paseo marítimo para salvar la escollera, que no fue retirada.

La arena iba a estar sustentada por un dique de abrigo de entre 150 y 200 metros que por entonces aún estaba en construcción. Estaba previsto que se realizara otro dique similar en el otro extremo de la playa, pero finalmente sólo se construyó el actual, lo que provocó que poco a poco se redujera la arena. De un kilómetro de longitud, en la actualidad la playa sólo ocupa una extensión de 300 metros lineales.

La playa no comenzó a usarse hasta bien entrado el verano, ya que las obras comenzaron a principios de junio. La ciudadanía esperaba con anhelo la apertura de una playa más recogida y con aguas más tranquilas que las del litoral de levante y desde entonces cuenta con fieles bañistas, aunque a lo largo de su historia ha sufrido varios episodios de contaminación por vertidos de crudo en la Bahía o por aguas fecales procedentes de la red de saneamiento del municipio.

Planes de expansión

Hace unos años se barajó la posibilidad de que la playa de poniente se regenerase para abarcar el kilómetro de longitud previsto en el plan inicial. Incluso en diciembre de 2009 el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino anunció una inversión de 7.101.172 euros para regenerar esta zona del litoral. El proyecto se quedó a expensas de un informe de impacto ambiental que no llegó a ver la luz.

En diciembre de 2009 el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino anunció una inversión de 7.101.172 euros que se quedó pendiente del informe de impacto ambiental

Lo que sí se redactó fue un estudio previo y el proyecto de recuperación de la playa de poniente con varias alternativas por parte de técnicos de la Demarcación de Costas de Andalucía-Atlántico y de la empresa Prointec.

Las obras previstas consistían en el aporte de un volumen de 471.650 m3 de arena procedente de las labores de mantenimiento de la duna de Valdevaqueros y del yacimiento submarino del Placer de Meca. Este aporte requería la construcción de dos diques perpendiculares a la línea de orilla, similar a lo que se pretende en la actualidad.

El proyecto recogía que estas actuaciones iban a solventar "las necesidades y las demandas de uso" triplicando la superficie de playa seca actual, creando cerca de 60.000 m3 de nueva zona de playa; incrementando la longitud de playa de 380 metros a cerca de 1.300; obteniendo unas anchuras de playa mínimas de unos 25 o 30 metros a lo largo de toda la longitud de orilla; acondicionando, adecuando y saneando el entorno, mejorando la calidad paisajística de la zona; y ampliando la zona de servicios de la playa, arreglando e incrementando el número de accesos.

Después de 30 años está más cerca la recuperación de la gran playa de La Línea que miraba al interior de la Bahía.

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