El Real Club Náutico de La Línea afronta su futuro con una mezcla de incertidumbre e ilusión. En este cóctel la ilusión la pone el proyecto para la nueva sede de la entidad, que se trasladaría a la zona portuaria de Poniente y volvería a tener una salida al mar después de que la construcción de la N-351 a finales de los años 80 eliminara la playa a la que tenían salida las instalaciones, que se quedaron al otro lado. La incertidumbre surgió días después de que el proyecto fuera presentado a los socios. El terreno en el que se asienta el Club Náutico, fundado en 1946, era del Ministerio de Defensa, pero en la década de los 2000 pasó a manos municipales y el Ayuntamiento realizó una operación urbanística con Ámbito Sur (Asur), que se hizo con la propiedad del terreno. Asur entró en concurso de acreedores, estos terrenos se sacaron a subasta y una empresa se ha hecho con ellos por unos 4 millones de euros. Ahora la junta directiva del club, presidida por Rafael Trujillo, está a la espera de que los nuevos propietarios se pongan en contacto para exponer la situación y llegar a una solución entre las partes implicadas.

Los actuales responsables del club esperan que los nuevos propietarios de la parcela, de suelo urbano consolidado con una superficie de 6.694 metros cuadrados y la posibilidad de construir edificios de hasta seis plantas, se muestren sensibles a la situación histórica del club. La entidad fue fundada en 1946 y es un referente en la sociedad linense. Además de club deportivo, la entidad tiene un importante componente social con más de 600 socios que pueden usar los salones para ver la televisión, reunirse y celebrar eventos y durante todo el verano tienen acceso a la piscina. El componente deportivo también tiene gran importancia porque son muchos los pequeños -y también mayores- los que compiten con la bandera de la entidad linense.

El Real Club Náutico ha conseguido situarse en el décimo puesto del ranking andaluz, en el que hay 67 equipos, y con otros clubes de la zona celebra de forma periódica regatas en la zona de Poniente de La Línea, lo que genera actividad en torno a este deporte.

Con este marco, la entidad tiene en proyecto construir una sede en la zona portuaria de Poniente para tener acceso directo al mar porque en la actualidad los niños tienen que cruzar la N-351 para poner entrenar en el mar, a veces cargando con las embarcaciones y otros aparejos. Las nuevas instalaciones serán un calco de las actuales, aunque modernizadas, y suman como novedad un pabellón para guardar los barcos de vela. Junto a la sede del Real Club Náutico también estaría el nuevo local del Club Deportivo Linense de Caza y Pesca. Ambas entidades se sumarían en esa zona al Club Marítimo Linense y al puerto deportivo Alcaidesa Marina. "Entre todos nos llevamos bien y tenemos que aprovechar esa sinergia", apunta Rafael Trujillo.

El proyecto cuenta con el visto bueno del Ayuntamiento y ya ha sido trasladado a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, que ahora debe recibir los anteproyectos de las instalaciones de las dos entidades.

Para financiar la futura sede, el club baraja varias alternativas. La ideal, señalan los responsables de la entidad, es alcanzar a un acuerdo con los propietarios del actual terreno, que salió a subasta por 8,2 millones de euros en el concurso de acreedores de Ámbito Sur y ha sido adquirida por 4,1. Los nuevos dueños de la parcela aún no se han puesto en contacto con el club. Otra opción es que sean los socios los que sufraguen las nuevas instalaciones, aunque la entidad debería realizar un desembolso importante porque sus más de 600 socios pagan una cuota mensual de 26 euros.

La actual junta directiva, que lleva tres años de mandato, tiene la nueva sede y la venta del actual terreno como principal reto, pero también continúa con el objetivo de fomentar la práctica de la vela como un deporte no elitista. Para ello la entidad desarrolló durante el pasado curso escolar un programa de la oferta educativa municipal denominado A toda vela en el que 547 alumnos de 3º de Primaria han podido aprender algunas nociones sobre vela y algunos de ellos se han animado a recibir su bautismo de mar. "Queremos quitar de la cabeza que la vela es clasista. La intención es que la gente lo vea como algo natural, como en el antiguo Egipto, y que se haga desde edades tempranas", señala el directivo Marco Belizón.

Otro aspecto a tener en cuenta sobre la vela es la posibilidad de generar empleo, ya que la mayoría de monitores no son profesionales, sino que son personas que llevan toda la vida navegando y enseñan a los niños que comienzan a hacerlo. Por este motivo desde el Real Club Náutico animan a centros como Los Pinos, que tiene un ciclo formativo de Técnico Superior en Animación de Actividades Físicas y Deportivas, a que incluyan la vela entre estos deportes. "Podría ofrecer una salida laboral en cualquiera de los clubes náuticos que hay en la zona, desde Algeciras a Sotogrande e incluso en la Costa del Sol", señalan.

Para fomentar el deporte de la vela como un medio de vida y de generación de riqueza, la nueva sede del club jugaría un papel muy importante. Los responsables de la entidad, además, estiman que en estas instalaciones la Federación Española de Vela podría tener un Centro de Alto Rendimiento debido a las características del campo de regata. "Hay varios centros en toda España y los regatistas entrenan en uno o en otro, según las características del lugar en el que se vaya a realizar la competición", indican.