Un cuarto de siglo en la plaza Fariñas
La Unión Deportiva Linense celebra mañana 25 años en su actual sede, que en su momento fue calificado como el más moderno de todas las entidades sociales de Andalucía
La Unión Deportiva Linense celebra mañana el 25 aniversario de la inauguración de su actual sede. En su momento, en 1989, el actual edificio de esta entidad, que también hoy cumple 92 años desde que fue fundada, era considerado el más moderno y funcional de las entidades sociales de Andalucía debido a su equipamiento y funcionalidad.
Se trata de la cuarta sede que ha tenido la añeja entidad en su dilatada historia. La primera sede estuvo en el patio de La Serrana, en la esquina de la calle Castelar con San Felipe. No fue hasta 1946 cuando la Unión Deportiva arrendó un local de la calle Real, donde estuvo hasta 1988. En ese año la entidad se trasladó durante un año y medio al antiguo mesón La Jerezana, en la plaza Cruz Herrera, antes de instalarse en la plaza Fariñas. Este traslado temporal fue motivado porque a la muerte Biagio D'Amato, propietario del local de la calle Real en el que estaba la Unión Deportiva, sus herederos decidieron no prorrogar más el contrato de arrendamiento. De hecho, cuando D'Amato ya era muy mayor hubo intentos para que la entidad dejara esa sede pero la labor de la asociación que por entonces presidía Marcos Trujillo permitió renovar los contratos, cada vez más caros y cortos, hasta que llegó el ultimátum de junio de 1988 para que en tres meses, el 30 de septiembre de ese año, la Unión abandonara el local.
Ese momento fue crítico para esta añeja asociación, que perdió unos 400 socios y se vio en un local que no satisfacía las exigencias de sus miembros. La junta directiva pidió a sus socios un gasto extraordinario de 50.000 pesetas a cada uno para hacerse con el solar donde de la plaza Fariñas donde estuvo ubicada la Cruz Roja. Desde ahí la entidad sufrió dificultades financieras, operaciones de crédito y momentos de serias dificultades. Pero la constancia de la directiva y la ayuda del Ayuntamiento fue clave para que se levantara el nuevo edificio, con lo que la entidad recuperó socios hasta llegar a los 1.500.
El acto de inauguración del magnífico edificio que hoy en día sigue presidiendo la plaza Fariñas tuvo lugar el 23 de diciembre de 1989 a partir de las 18:30 horas con la entrega de flores a la Patrona, el descubrimiento de las placas conmemorativas y una copa ofrecida a socios y simpatizantes en un local de la avenida de la Banqueta.
Las placas eran tres. Una primera fue descubierta por el anterior presidente, Germán Montes, en la que se reflejaba el agradecimiento de la junta directiva a los socios por el esfuerzo realizado para poder disponer de estas nuevas instalaciones.
El presidente en esa época, Marcos Trujillo, descubrió otra en la que los socios le agradecían su labor. En la tercera placa, el vicepresidente, José Zamora, descubrió los nombres de los integrantes de la junta directiva del momento.
Se da la circunstancia de que el presidente, Marcos Trujillo, presentaría la dimisión por motivos laborales tras este hito histórico para la Unión Deportiva, mientras que sus compañeros de junta también harían lo mismo debido al cansancio acumulado por todo el trabajo realizado.
En aquel momento era presidente Marcos Trujillo, que contaba en su directiva con Miguel Rocha, Francisco Javier Sánchez Chico, Pepe Zamora, Manolo Puente, Antonio García Clavo, Pedro Duarte, Eduardo Puertas, Manuel Sánchez Jiménez, Luis Díaz, Manolo Díaz y Paco Jiménez.
La entidad impuso la insignia de oro y brillantes al teniente de alcalde Antonio Marmolejo, en nombre del alcalde, tras la inauguración. Además se hizo entrega de la primera medalla de oro de la entidad, el máximo galardón que otorga la Unión, a Marcos Trujillo "por considerar que sus indiscutibles méritos propios, por su tenaz dedicación, por su sacrificada entrega y constante dedicación compartidas con toda su junta directiva se ha hecho merecedor de ostentan la más alta distinción de nuestra entidad, que entregamos con todo nuestro cariño y gratitud".
Por entonces la entidad aglutinaba a unos 1.500 socios, mientras que hoy en día esa cifra no llega a las 400 personas. Número que dejan clara la caída en desgracia de este tipo de asociaciones como la propia Unión Deportiva o el Círculo Mercantil.
En un principio fueron abiertas la planta baja y la primera. La planta baja cuenta con la conserjería, el bar y el restaurante, además de un pequeño espacio dedicado al descanso de los socios. En la parte trasera existe un patio y los servicios. Y en la primera planta están el salón de televisión, los servicios, los salones de juegos, el billar, la sala de dominó y el salón de lectura.
Años después de la apertura fue acondicionada la segunda planta, donde la Unión Deportiva ofrece un enorme salón de actos que ha sido escenario de muchos acontecimientos relacionados no sólo con la vida de la entidad, sino con la de muchas otras que han solicitado el uso de las instalaciones, desde cofradías y hermandades hasta exposiciones pictóricas. Este salón ha albergado elecciones de reina, meriendas, cenas, fiestas, presentaciones de discos y carteles y hasta asambleas de la Balona. También arriba se encuentran los salones de tenis de mesa y de la juventud, además de las oficinas de la entidad y la biblioteca, donde está el acceso al escenario del salón de actos. La azotea sirve de almacén aunque también se han celebrado fiestas.
La entidad celebra mañana este aniversario con una copa y un tapeo para los socios a partir de las 13:30 horas.
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