Borja Jiménez recibirá el alta este miércoles con la mira puesta en la encerrona de La Línea con Victorinos

La Línea/El torero sevillano Borja Jiménez se recupera de la grave cornada en el muslo acaecida al entrar a matar al sexto toro de la ganadería de La Palmosilla durante la corrida del 7 de julio de los Sanfermines y está previsto que este miércoles reciba el alta médica y abandone el Hospital Universitario de Navarra.

En la última revisión que se le ha hecho este martes de la herida, con lesión penetrante en el triángulo de Scarpa, que disecó la artería femoral y penetró de forma transversal hasta la parte externa del muslo, evoluciona bien y el paciente, que ha empezado "a deambular", ya no tiene fiebre, según ha informado el cirujano Ángel M. Hidalgo.

A pesar de su gran extensión y lo delicado de la zona, la "limpieza" de la cornada, que no afectó a vasos importantes, hace prever que el diestro prosiga su recuperación en Sevilla, junto al fisioterapeuta José Antonio Salas, a fin de recuperarse para su vuelta a los ruedos en una temporada en la que ha logrado éxitos como el de la Feria de San Isidro, donde salió a hombros de Las Ventas y se acabó proclamando triunfador del ciclo.

La completa curación de Borja Jiménez quedará ahora pendiente de un inexorable reloj de arena. El espada ha dado por perdidos sus compromisos en Bayona y Manzanares, pero se ha propuesto reaparecer a toda costa el viernes 19 de julio en La Línea de la Concepción, donde le aguardan seis toros de la ganadería de Victorino Martín, que debuta en la plaza del Arenal. Si bien suele decirse que los toreros "están hechos de otra pasta", su apoderado, Julián Guerra, ve "muy complicado" alcanzar esta meta, según declaró este lunes a Europa Sur. Una cosa es una corrida "al uso" y otra distinta, una encerrona con los de Albaserrada. Sin embargo, el de Espartinas explica que la cita en La Línea "le hace especial ilusión" debido a que es un homenaje televisado al maestro Francisco Ruiz Miguel.

En caso de no llegar a tiempo o que una complicación médica truncase sus deseos, la empresa linense baraja que sea una terna la que pasaporte la victorinada, a cargo de expertos en el encaste, como Manuel Jesús 'El Cid' o Manuel Escribano.

En la primera corrida de la feria de San Fermín, Borja Jiménez le hizo una arrebatada faena a un toro con clase de la divisa de La Palmosilla, que pasta en Tarifa, tras la cual el público le pidió dos orejas tras volcarse en la suerte suprema, momento justo en el que sufrió la cornada que le mantiene aún hospitalizado.