El conocido psiquiatra linense, Francisco Caparrós falleció en la mañana de ayer a los 61 años en el Hospital Quirón Campo de Gibraltar. El desenlace se ha producido pocas semanas después de detectársele un tumor cerebral.

Caparrós fue un destacado discípulo del reconocido psiquiatra sanroqueño Carlos Castilla del Pino, y supo llevar a gala el nombre de la ciudad en todos los foros y en todos los ámbitos de su vida.

Fue también un gran impulsor del diálogo que siempre consideró que debía existir entre gibraltareños y linenses. Sin duda, en l barrio de la Atunara, que le vio crecer y la ciudad existió ayer un gran pesar

Sus restos se encuentran en el tanatorio de Servisa y la misa in corpore in sepulto se celebrará, hoy, a las cuatro de la tarde, en la Iglesia de San Pedro Apóstol (calle Siete Revueltas), para ser incinerado con posterioridad.

Francisco Caparrós Lacera, ha sido algo mucho más que un médico ilustre para La Línea. Aparte del título de especialista en psiquiatría, heredó junto con sus hermanos el famoso Restaurante La Marina, del que pronto cogió las riendas para convertirlo en el santo y seña de la gastronomía linense. Quiso que La Marina fuese el referente del buen comer, de la calidad, de la excelencia, de la buena mesa y del cuidado servicio con la mejor bodega. Consiguió que La Línea de la Concepción, con la Marina como referente, apareciese en la Guía Michelín; que los miembros de la Academia Gastronómica valoraran en positivo la calidad de su cocina y de sus productos exquisitos de los mares del Estrecho. Por La Marina han pasado famosos y personalidades del mundo, pero también muchos linenses orgullosos de tener en su pueblo un gran Restaurante.