Cuando un grupo de marines británicos 'invadió' una playa de La Línea

La Línea/Este lunes se han cumplido 23 años del rocambolesco desembarco por error de un comando de treinta soldados del Tercer Mando de los Marines Reales de la Armada británica en la playa de Los Manolos de La Línea, situada en el litoral de Poniente junto a la Verja fronteriza con Gibraltar. El anecdótico incidente tuvo lugar el 17 de febrero de 2002, cuando los militares creían que habían llegado a Gibraltar, hasta que varios pescadores les informaron de que estaban en el lado equivocado de la frontera. Los marines se retiraron apresuradamente. El asunto se quedó en una anécdota y no tuvo consecuencias diplomáticas ni afectó a las buenas relaciones que entonces tenían Madrid y Londres.

El insólito incidente tuvo lugar sobre las diez y media de la mañana, cuando estos treinta marines realizaban una serie de ejercicios militares de incursión en la costa desde dos lanchas semirrígidas. El objetivo de estas pruebas consistía en penetrar en la costa gibraltareña, con tácticas propias de comandos militares, para enfrentarse allí a un supuesto enemigo. Sin embargo, el desembarco se llevó a cabo por error en la citada playa de La Línea, donde los marines británicos llegaron portando sus fusiles de asalto SA 80 y sus morteros ligeros de 60 milímetros.

Varios pescadores gibraltareños que en ese momento se encontraban en las inmediaciones de la zona se dieron cuenta del error y, a voces, advirtieron a los marines británicos que se encontraban en una playa española. Los mismos soldados ingleses se mostraron extrañados porque, tras desembarcar, no encontraron la supuesta fuerza enemiga que debía estar esperándoles. Poco tiempo después hacía acto de presencia en el lugar una patrulla de la Policía Local, se supone que alertada por algún vecino de La Línea. Los agentes dialogaron con los responsables del comando militar británico y les informaron de su equivocación, retirándose los soldados hacia zona gibraltareña. Las unidades militares de la Armada británica permanecieron en la playa unos diez minutos.

El Ministerio de Defensa británico calificó de "lamentable" y pidió disculpas por la "invasión" de territorio español por error. "En el transcurso de los ejercicios, se suponía que una unidad tenía que desembarcar en Gibraltar, pero lo hizo unos pocos metros más allá, en una playa del lado español", explicó un portavoz del citado ministerio. El incidente causó "mucha vergüenza, se lamenta el error y se ha aprendido una lección", indicó el portavoz británico, quien subrayó bromeando que "no estábamos intentando conquistar España ni tenemos planes para una invasión".

Por su parte, el portavoz de prensa de la Oficina de Información Diplomática, dependiente del Ministerio español de Asuntos Exteriores, Luis Arias, restó importancia a este incidente, al asegurar que el mismo "ha carecido de relevancia porque se ha tratado de un error sin ningún tipo de intencionalidad diplomática". Según este responsable, en cuanto los soldados británicos se dieron cuenta de la equivocación que habían cometido "pidieron mil disculpas y se marcharon inmediatamente de la playa en las embarcaciones con las que desembarcaron".

Los marines formaban parte de la dotación del portahelicópteros de combate HMS Ocean, navío que se dirigía a las aguas del Golfo Pérsico con la misión de reemplazar en la zona al portaaeronaves HMS Illoustrous, que había tomado parte en las operaciones militares que se llevaron a cabo contra Afganistán a raíz de los atentados terroristas contra Estados Unidos del 11 de septiembre de 2001.

Los soldados creían que la playa en la que desembarcaron pertenecía a la colonia británica de Gibraltar, donde habían programado desarrollar un ejercicio que en el argot de la OTAN se conoce como Passex (ejercicio al paso). Sin embargo, todo parece indicar que equivocaron su rumbo y se introdujeron en la costa linense para estupor de todos de los presentes.