El sindicato Unite the Union y los trabajadores de la Agencia de Fronteras y Guardacostas de Gibraltar (BCA) han suspendido la huelga de brazos caídos que amenazaba con colapsar el paso fronterizo con La Línea desde este viernes y que había generado una enorme preocupación entre los trabajadores transfronterizos.

La decisión la han tomado después de que el Gobierno de Gibraltar se haya comprometido este mismo viernes en una reunión de última hora con representantes de la plantilla y el sindicato a revisar sus reclamaciones sobre unas instalaciones dignas en el aeropuerto gibraltareño, motivo por el que habían convocado la protesta.   

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La entrada a Gibraltar.

l Gobierno afirmó en un comunicado de prensa que "existen canales adecuados para informar sobre problemas de salud y seguridad en la terminal aérea de Gibraltar y en otros lugares" y que Gibraltar Air Terminal Ltd. ha confirmado que "no hay informes pendientes de salud y seguridad que requieran acción alguna, a pesar de la posición contraria del sindicato".

En cualquier caso, el Ejecutivo dice que, en un plazo de cinco días hábiles, un asesor independiente de salud y seguridad comenzará a elaborar un informe sobre las instalaciones de la terminal del aeropuerto de Gibraltar y realizará su primera visita dentro de 15 días. Esta persona tendrá acceso completo al aeropuerto y todas sus infraestructuras siempre teniendo en cuenta las pautas de protección de los pasajeros y el personal, y podrá examinar cualquier informe que la plantilla de Fronteras y Guardacostas haya presentado oficialmente.

El Gobierno recomienda a Unite "que comunique sus inquietudes a través de los mecanismos de Salud y Seguridad establecidos para que puedan ser registradas, seguidas y corregidas según las circunstancias lo requieran dentro del plazo adecuado". El asesor independiente revisará dichos informes. 

El Ejecutivo afirmó que esta auditoría independiente se pondría en marcha "independientemente de la amenaza" de una protesta en la Verja y el aeropuerto, aunque esperaba que los trabajadores y el sindicato comprendieran que "su amenaza ahora es aún más hueca, ya que simplemente redundará en molestias para los ciudadanos y toda la comunidad" durante lo que se espera que será "un fin de semana largo y muy ocupado". "Los niños, ancianos y discapacitados que sufren inconvenientes se preguntarán por qué los miembros de Unite están actuando de esta manera, dado que se ha ofrecido un proceso independiente para resolver sus quejas", apostilló antes de que se desconvocara la huelga de brazos caídos.

Según reza el comunicado, los funcionarios gubernamentales reafirmaron en una reunión este viernes que la solicitud del sindicato de que se ponga en marcha un comedor separado provisional exclusivamente para el personal del BCA es "inviable a la espera de que se determine un acuerdo entre el Reino Unido y la UE posterior al Brexit". "Ya existe una sala de personal dentro del aeropuerto que es utilizada con frecuencia por todos los miembros de la plantilla y trabajar para ampliarla o reemplazarla ahora sería un costo innecesario e irrazonable para el contribuyente", asegura.

"El Gobierno no está dispuesto a dar un trato preferencial a este respecto a los funcionarios de la BCA sobre otros trabajadores del Aeropuerto de Gibraltar únicamente por la organización para la que trabajan. Se recuerda a los funcionarios de la BCA que tienen a su disposición otros dos comedores: uno en la frontera y otro en la sede de la agencia", apostilla.

Los funcionarios gubernamentales transmitieron su disposición y compromiso para continuar reuniéndose y dialogando sobre las preocupaciones del sindicato.