Colaboración

Gibraltar y la tabacalera japonesa JTI firman un acuerdo para evitar el contrabando

  • El fabricante de cigarrillos y el gobierno del Peñón establecen su cooperación para promover un mercado de tabaco legítimo y transparente

Tom Osborne y Fabian Picardo, en la firma del acuerdo.

Tom Osborne y Fabian Picardo, en la firma del acuerdo. / E. S.

El Gobierno de Gibraltar ha firmado un acuerdo con el fabricante de cigarrillos Japan Tobacco International (JTI), para proteger el comercio legítimo de productos de tabaco y promover un mercado de tabaco estable y transparente. La firma japonesa cuenta entre su oferta con marcas tan conocidas Winston y Camel.

El Memorándum de Entendimiento firmado por las partes esboza las bases de un marco de cooperación que incluye el intercambio de información y mejores prácticas, la identificación de la autenticidad de los productos y la impartición de formación al Servicio de Aduanas de Gibraltar en materia de reconocimiento de productos falsificados.

“Acogemos con satisfacción la firma de este Memorándum de Entendimiento con JTI, puesto que estamos comprometidos en trabajar en colaboración con los productores para erradicar el comercio ilícito de productos de tabaco", ha afirmado Fabián Picardo, Ministro Principal de Gibraltar. "El comercio ilícito fomenta una mayor criminalidad transfronteriza, el comportamiento antisocial y perjudica a los negocios que operan de forma legítima. Revisamos permanentemente nuestros procedimientos y nuestra legislación para garantizar el adecuado cumplimiento de nuestras leyes y condiciones de las licencias de tabaco por parte de todas las entidades locales involucradas en el negocio del tabaco”, ha añadido el dirigente.

La firma del acuerdo tuvo lugar en el Aeropuerto de Gibraltar en presencia de Picardo; de John Rodríguez, administrador del Servicio de Aduanas de Gibraltar y de Tom Osborne, director general de JTI Iberia, así como de miembros del Departamento de Lucha contra el Comercio Ilícito de JTI.

Tom Osborne ha subrayado que "es vital que exista una cooperación activa entre gobiernos y la industria tabacalera para combatir el comercio ilícito en todas sus formas. El comercio ilegal de productos de tabaco es una cuestión acuciante a escala internacional que afecta a nuestra recaudación fiscal, a la estabilidad del mercado, promueve el desprecio de la ley y perturba la seguridad pública”.

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