El Gobierno de Gibraltar, que encabeza Fabian Picardo, ha mostrado su rechazo y calificado como "hecho vergonzoso" el uso del término "colonia" para referirse a Gibraltar por parte del Consejo y el Parlamento Europeo en la política de exención de visados que aplicará a los ciudadanos británicos tras el Brexit.

Para el Ejecutivo gibraltareño, la decisión del Parlamento Europeo "de revertir su posición y doblegarse ante la presión del Consejo Europeo", ilustra los problemas que sufre la Unión Europea. "Resulta obvio que España ha ejercido gran presión y que los eurodiputados españoles han aplicado tácticas intimidatorias, por cuestiones puramente nacionalistas, que han resultado en la aceptación del término colonia en relación con Gibraltar. Se trata de un hecho vergonzoso", ha resaltado el Gobierno de la roca.

La medida en cuestión establece que los ciudadanos británicos tendrán la posibilidad de entrar y permanecer en la Unión Europea sin necesidad de visado durante 90 días en un periodo de 180 días y únicamente será aplicable en el caso de que se produzca un Brexit sin acuerdo. "La inclusión de la nota al pie no tiene consecuencias prácticas, en el sentido de que las normas sobre viajes sin visado seguirán siendo aplicables a los ciudadanos británicos de Gibraltar. El único objetivo de este ejercicio parece haber sido el empleo de lenguaje ofensivo y peyorativo, en un intento de irritar tanto a Gibraltar como al Reino Unido. El término oficial para el estatus de Gibraltar en la legislación internacional y según la Carta de las Naciones Unidas es Territorio No Autónomo".

Gibraltar apuntó que el resto de territorios no autónomos del Reino Unido se han quedado al margen de ese "lenguaje insultante" por lo que estiman que Gibraltar "ha sido señalado". 

"El Gobierno ha constatado que la reunión de la Comisión LIBE de esta mañana estuvo repleta de eurodiputados y funcionarios españoles, muchos de los cuales ni siquiera eran miembros de dicha Comisión. Se observó una intención clara y concertada de obtener el máximo número de votos asignados a cada grupo, moviendo individuos de uno a otro. Este comportamiento ha escandalizado a los eurodiputados de otras nacionalidades, que se han quejado por la mala gestión del asunto e incluso han declarado que los eurodiputados del PP deberían sentirse avergonzados", concluye el Gobierno de Picardo.