...Y disfrutaron como cochinos

El Nuevo Mirador lo pasa en grande con el título del Algeciras y se carga de ilusión para afrontar la eliminatoria de campeones a Segunda B La grada canta, hace la ola y reconoce a la plantilla de Sanlúcar en el día más feliz de los albirrojos en los últimos seis años

1. La mascota Miradín fue uno de los manteados. 2. Dos pequeños algeciristas disfrutan con su equipo. 3. El meta Romero se lanza en plancha en el vestuario ante las miradas y risas de los compañeros. 4. Los jugadores celebran el título con la Curva 1912. 5. Rafaelín, Pepe Tapia, Periquito y Foncubierta reciben un homenaje como recuerdo de su ascenso a Segunda de la 62/63. 6. Antonio Merino enseña tres dedos, tres son las veces que ha sido campeón en Tercera: con Balona, San Fernando y Algeciras. 7. La plantilla en el vestuario, que fue una fiesta. 8. Javi Chico, en la imagen junto a Pepe Álvarez, de Centenario Rojiblanco, recibe un obsequio como mejor jugador de la Liga según los aficionados. 8. Marín, con un extraño mono de peluche durante la celebración. Reportaje gráfico: Erasmo Fenoy.
1. La mascota Miradín fue uno de los manteados. 2. Dos pequeños algeciristas disfrutan con su equipo. 3. El meta Romero se lanza en plancha en el vestuario ante las miradas y risas de los compañeros. 4. Los jugadores celebran el título con la Curva 1912. 5. Rafaelín, Pepe Tapia, Periquito y Foncubierta reciben un homenaje como recuerdo de su ascenso a Segunda de la 62/63. 6. Antonio Merino enseña tres dedos, tres son las veces que ha sido campeón en Tercera: con Balona, San Fernando y Algeciras. 7. La plantilla en el vestuario, que fue una fiesta. 8. Javi Chico, en la imagen junto a Pepe Álvarez, de Centenario Rojiblanco, recibe un obsequio como mejor jugador de la Liga según los aficionados. 8. Marín, con un extraño mono de peluche durante la celebración. Reportaje gráfico: Erasmo Fenoy.
Alessio González Algeciras

20 de mayo 2013 - 05:02

El grito de "campeones, campeones" aún resuena con fuerza en los muros el Nuevo Mirador. La hinchada albirroja, optimista desde primera hora de la mañana, se dejó contagiar por el entusiasmo de un equipo convencido de su misión que alcanza sus metas peldaño a peldaño: primero con la liguilla, después con una plaza en la próxima Copa del Rey y ayer con la celebración del título de campeón del grupo X de Tercera división. Tras este logro, conseguido por última vez en 2007, el algecirismo se infló de ilusión antes de la última cruzada, antes del asalto a la Segunda división B por la vía rápida, por el camino de los campeones.

El Mirador vivió una fiesta. Los más tímidos se contuvieron al principio, tardaron en dejarse llevar por ese aroma especial que rodea a este Algeciras. Ya en la sede del club, con el cafelito de la mañana, algunos se mostraban cautos. Pero antes del último obstáculo la gente se merecía algo así. Tras varias campañas de tragos amargos, de palos, de sinsabores, ayer el algecirismo vibró en su estadio, cantó, hizo la ola, disfrutó como hacía tiempo no se recordaba.

El clima de tranquilidad nunca peligró a pesar de la digna salida del descendido Montilla. El gol de Javi Chico facilitó una calma que dio paso al jolgorio con el segundo tanto, el de Juan Llaves. Con media hora por delante la grada comenzó a entonar el "campeones, campeones" y, espoleados por la Curva, el campo se encendió en cánticos mientras cayeron el tercero y el cuarto. Y apareció la ola, ese sinónimo de felicidad futbolera. Los chicos de la Curva mostraron una pancarta que arrancó aplausos: "Si no hay dinero, sobra orgullo y sentimiento. Gracias directiva". Los cambios fueron ovacionados a lo grande, especialmente el de un Javi Chico que ya encarna el sentimiento de este escudo.

El pitido final convirtió el terreno de juego en un escenario de abrazos, besos y gestos cariñosos. Con camisetas para la ocasión, dedicadas al vestuario de los que se hacen llamar "los cochinos"-con Miguel Ángel Berlanga como gran cabecilla-, plantilla, cuerpo técnico, empleados y directiva recibieron un merecido homenaje por parte del respetable. La afición, unánime en pie, se rindió a sus guerreros en una celebración llamada a ser la penúltima del curso. Fue el momento final de descargar todas esas tensiones en un acto total de comunión entre todos los que respaldan estos colores antes del último paso hacia la ansiada categoría de bronce.

stats