El Algeciras se reconcilia con el Nuevo Mirador

Se hizo esperar pero, por fin, llegó. El Algeciras CF se reencontró con la victoria en el Nuevo Mirador al ganar a la AD Mérida por un 1-0 que supo a poco a muchos aficionados, pero que dejó un buen sabor de boca al tener la salvación a la vista.

El Fuenlabrada fue el último equipo que se marchó sin premio de La Menacha, el pasado 26 de febrero. Por aquel entonces, el Algeciras llevaba desde diciembre, en el Clásico de la primera vuelta, sin ganar.

Caprichos del destino, este triunfo llegó tras ganar a la Balona en el Municipal, un partido que permitió a Ania y sus pupilos coger aire y continuar la senda frente a su afición. Una afición que sufrió durante el partido por el ajustado resultado pero que premió como corresponde a los protagonistas al finalizar el encuentro.

La imagen que ejemplificó la comunión entre plantilla y algecirismo se vivió cuando todos cantaron y aplaudieron al unísono al ritmo que marcaba el fondo sur. Un momento dulce que se echaba de menos en el Nuevo Mirador. Más de 4.000 personas acudieron a la llamada del club, que ofreció entradas a precios muy populares para un choque vital.

Los jugadores, después del delirio vivido la semana anterior tras el Clásico, tenían clara la importancia del duelo ante los extremeños. "Era un partido muy importante y lo afrontamos así durante la semana", comentó Carlos Albarrán.

David Martín, que volvió a la titularidad y se mostró muy activo en el partido, explicó que tenían entre ceja y ceja conseguir los tres puntos ante su gente, más aún con el objetivo de la salvación en el punto de mira. "Dimos un pasito más, pero todavía vamos a tener que luchar mucho", apuntó el segoviano.

En el global de la temporada, el Algeciras continúa siendo el cuarto equipo que menos puntos suma en casa, justo por detrás de la Balompédica Linense. Solo cinco triunfos y 21 puntos, los mismos cosechados lejos del Mirador. Ahora tiene la oportunidad perfecta para mejorar esos números.

La próxima estación es San Sebastián de los Reyes, reeditando el duelo de la primera ronda de la fase de ascenso de Almendralejo. Allí la salvación, aunque no matemáticamente, puede quedar amarrada, pero el templo albirrojo será clave para sellar oficialmente la permanencia en la categoría.

Celta B y Real Madrid Castilla, dos de los mejores equipos de la liga, tienen pendiente su visita al lado rojiblanco del Campo de Gibraltar y, más que nunca, jugadores y afición deben ser uno para que las siete barras del escudo luzcan la próxima temporada en la Primera Federación.