Unionistas: la afición como motor para devolver a Salamanca a la élite

El Algeciras CF recibe este domingo (12:00) al Unionistas de Salamanca, una entidad que se autodefine como "club de fútbol popular creado en 2013 en homenaje a la desaparecida UD Salamanca". Bajo esta premisa y con la afición como motor principal, el conjunto salmantino trata de devolver a la ciudad al fútbol de élite aunque sea como un objetivo a medio plazo.

El Unionistas atesora una corta pero intensa historia. La institución, en la que cada socio tiene voz y voto, inició su caminar en categoría provincial para colarse en el estreno de la Primera Federación y acariciar, al igual que el Algeciras, el último playoff de ascenso. El club tiene una masa importante, de hecho la pasada andadura fue capaz de reunir 400.000 euros en un abrir y cerrar de ojos para cambiar el césped de su estadio en una campaña de financiación que se viralizó.

El conjunto de Salamanca viene de lograr su celebrada primera victoria de la temporada tras imponerse al Rayo Majadahonda, lo que provocó una nueva destitución en el grupo. Los blanquinegros comenzaron su andadura con una abultada goleada en Córdoba, sumaron un empate en su estreno en casa ante el sorprendente Linares y después volvieron a caer a domicilio, esta vez en Valdebebas. Tras este mal arranque, el Unionistas ha enlazado dos igualadas, ante Fuenlabrada y en Mérida, y consiguió los ansiados tres puntos en el Reina Sofía.

Además del chute moral, los salmantinos han tomado impulso para salir con seis puntos de los puestos de descenso que ahora delimita el Badajoz con cinco.

El club del Reina Sofía cumplió también otra efeméride al sumar su triunfo oficial 150 desde que el equipo echó a andar y festejó su primera alegría el 26 de octubre de 2014 en Provincial con una victoria ante el Carbajosa B. Desde entonces, el Unionistas ha ganado el 52% de los 287 partidos oficiales que ha disputado, entre ellos el duelo de la Copa del Rey que se llevó el pasado año del Nuevo Mirador.

El Unionistas comparte una similitud con el Algeciras y es que también se quedó a un solo punto del playoff de ascenso la pasada temporada. Los charros protagonizaron un debut en la Primera Federación más que notable aunque marcado por un polémico cambio en el banquillo. La entidad destituyó a Dani Mori con el equipo octavo con 40 puntos, a seis del playoff y 15 por encima del descenso. Mori fue reemplazado por Luis Ayllón en la jornada 28 y el equipo se quedó con la miel en los labios a pesar de ganar en la última jornada en Riazor. Como lo ocurrió al Algeciras en Sabadell.

La plantilla 22-23 del Unionistas poco tiene que ver con la anterior ya que solo mantiene a seis jugadores de la última campaña: el portero Salva de la Cruz, Ramiro, Pedraza, Nestral, De la Nava y De Miguel.

La revolución vivida el pasado verano conllevó hasta quince fichajes y comenzó en junio con el nombramiento del nuevo entrenador: Raúl Casañ. El club prescindió de Ayllón y apostó por el valenciano Casañ, de 45 años, llegó avalado por su trabajo con el Cornellà en el estreno de la Primera Federación y por su trayectoria en la Peña Deportiva de Ibiza.

Aterrizaron en Salamanca David Vicente (Las Palmas B), Joan Rojo (Zamora), Leal (Atlético Levante), Ramón Blázquez (Internacional), Mawi (Rayo Majadahonda), Borja Díaz (Hércules), Óscar Sanz (Nàstic), Beneit (Navalcarnero), Tropi (Rayo Majadahonda), Tarek (Montijo), Chapela (Cádiz B), Juanpa (Numancia), Losada (Zamora), Obeng (Espanyol B), Alberto (Deportivo B) y el zaguero Mario Gómez, ex de la Balona que regresó a la que fue su casa antes de marchar al Calahorra.

Entre las bajas sufridas, los de Salamanca perdieron a puntales como Rayco, Salinas, Cris Montes, Mier, Marín o Ramiro.