El Atlético Espeleño visita mañana (17:00) el Nuevo Mirador con ocho bajas. Eso es al menos lo que afirma su técnico, José Ángel Garrido, que llega de sumar su primera victoria tras siete jornadas en el cargo.

Una plantilla muy remozada en verano, tras un cambio de directiva, parece estar a la base de la delicada situación de los de Espiel, ya que buena parte de los jugadores, muchos de ellos llegados de categorías inferiores, aún no ha sido capaces de adaptarse a la categoría, especialmente exigente esta temporada en el grupo X.

Rafa Navarro, que llevó el equipo a Tercera y que en su primera andadura lo hizo pasearse por las inmediaciones de la parte noble no pudo empezar un nuevo ciclo. Los nuevos mandatarios decidieron que abandonase la entidad y pusieron la plantilla en manos de Salva Serrano, que solo contó con media docena de futbolistas de la campaña precedente.

Serrano fue destituido a mitad de octubre después de arrastrar cuatro derrotas ante rivales que en aquellos momentos se podían considerar directos en la pelea por la salvación (alguno, como la UD Los Barrios ya no lo son tanto) y de haber sumado solo dos victorias en once jornadas.

Garrido (ex de Écija, Pozoblanco y Villanueva de Córdoba) llegó al equipo el 23 de octubre como su relevo y de momento los efectos de una decisión tan extrema están por llegar.

Desde el desembarco en la entidad del nuevo preparador el balance tampoco es que haya mejorado mucho: un triunfo (el pasado domingo sobre el colista Guadalcacín) dos tablas y cuatro reveses. La consecuencia es que el equipo es vigésimo por mucho optimismo que trate de difundir su responsable técnico.

De acuerdo a los datos facilitados por el propio entrenador, el Atlético Espeleño llega al Nuevo Mirador con las ausencias del exbalono Sergio Ortiz, Hugo Rodríguez, Guti y José Antonio, todos ellos con lesiones de larga duración. A ellos se suma Pablo Mogollón, que arrastra problemas físicos de menor consideración, pero que le impiden jugar, al menos, el primero de los dos encuentros del largo puente.

Además, se pierden esta contienda de mañana, en su caso por sanción, Troyano, Juanito y Samuel. “Veremos cómo completamos la lista”, deslizó el míster.

Fuera de su estadio el balance del Espeleño no es precisamente para preocuparse. En sus ocho salidas solo ha puntuado tres veces: un triunfo en Conil (2-3) y eso fue en la tercera jornada y dos empates, en los campos de Cádiz B y Cabecense. En su último viaje perdió 3-1 en su visita al Xerez DFC.

En cuanto a los goles encajados la situación no es mucho mejor. Con 34 tantos en contra es el segundo peor entre los 22 competidores del grupo, solo superado precisamente por el colista Guadalcacín, que acredita 37.

En la plantilla son aplastante mayoría los futbolistas de Córdoba, lo que supone una medida de ahorro para la directiva, ya que el equipo se entrena en la capital (en una instalación que tiene alquilada) y sólo se desplaza hasta Espiel cada vez que le corresponde jugar.