Nostalgia y regusto a Balona añeja. A fútbol de otro tiempo. El homenaje, merecido como pocos, a Salvador Mota, el Gran Capitán de la Real Balompédica en la década de los setenta, se transformó ayer en una entrañable jornada de emotivos reencuentros entre ilustres veteranos de la Real Balompédica, que vinieron desde los más diversos puntos de la geografía española para testimoniar su reconocimiento al exzaguero. Este, que no podía hacer nada por ocultar la emoción que le embargaba, no paró de expresar su agradecimiento.

En el partido entre veteranos, los exjugadores del Real Betis se impusieron 1-2 a los anfitriones, pero el resultado, el partido en sí, no era más que una excusa para una reunión inolvidable para los que estuvieron presentes.

La Balona desempolvó lo más añorado de su historia para ensalzar la figura de uno de los jugadores más carismáticos y más queridos, dentro y fuera del vestuario, de cuantos se han enfundado su elástica: Salvador Mota.

No sólo acudieron al partido los que se vistieron de corto. Antonio García, Espejo, Bueno, Vázquez, Sivianes, Ayala, Juan Vázquez, Platero, Fali, Manolo Cruz… quisieron estar en el Municipal cuyas gradas estaban injustamente despobladas. Con todo, la presencia que más llamó la atención a los asisntentes fue la de Santiago Aragón. El Chato volvió a pisar el estadio después de casi dos décadas. "Ésta es mi casa", sentenció.

A la cita no faltó una numerosa representación de ex jugadores del Algeciras Club de Fútbol, encabezada por Goyo y Juan Lima.

Mota recibió numerosos presentes antes de que comenzase el choque y se fotografió con muchos de los que compartió vestuario en otra etapa.

Una vez finalizados los prolegómenos, los veteranos de la Balompédica formaron con un equipo integrado excompañeros de Mota, una de esas formaciones que recitan aún los seguidores más añejos: Diego Tinajero; Mauri, Ledesma, Pino, Loza, Bautista, Josele, Noly, Roldán, Espejo y Juan Manuel Quirós, además de Garrido, Sosa, Charte, Mayordomo, Ferrer, Vallecillo, Coco y Nuevo.

Pasados los primeros minutos, este grupo dejó sus plazas a un equipo con una media de edad sensiblemente inferior, formado por: Miguel Rivas; Charlo, Mena, Pavón, Miguel Ortiz, Jorge Pirri, Acris, Argüez, Márquez, Torremocha e Isidro, a quienes se fueron sumando más tarde Martín, Ángel Villar (p), Benítez, Isaac, Chichi, Julio, Aragón, Mairena, Noni, Hilario, Eliseo Garrido e Iñaki.

Por el Real Betis, con el linense Cristóbal Mejías al frente, formaron: Antonio; Blanco, Camacho, León, Parra, Juan Merino, Monsalvete, Cañas,Valentín, Reyes y Romo. También jugaron: Fernández, Mario, Ortega, Lobo, Navarro y Píriz.

Ejerció de árbitro el delegado comarcal del Colegio Andaluz,el sanroqueño Juan Moreno Barrera, que, curiosidades del destino, ya arbitró un partido de reconocimiento a Salvador Mota el 27 de agosto de 1988. José Antonio Delgado, que comenzó como auxiliar, ejerció de juez en la segunda parte. Manuel Fernández Casanova completaba el trío.

Jorge Pirri adelantó a los locales con un lanzamiento desde fuera del área, pero antes del descanso estableció la igualada el exalgecirista Monsalvete, que completaría la remontada en la segunda mitad.

Tras el encuentro tuvo lugar una cena, en la que participaron más de un centenar de comensales, en la que se sucedieron los reconocimientos a Salvador Mota, que estuvo acompañado por sus familiares.