Sotogrande, uno de los destinos más paradisíacos de Europa, se ha convertido este nuevo año en uno de los principales reclamos del sur para los clubes profesionales de fútbol de buena parte del viejo continente, que aprovechan el parón invernal de sus competiciones para concentrarse unos días al calor de estas latitudes. Un lugar en concreto del Campo de Gibraltar, el sanroqueño Santa María Polo Club, ha irrumpido con fuerza en un panorama tradicionalmente dominado por la jet set de las vecinas Marbella, San Pedro de Alcantára o Estepona.

Nada más comenzar 2015 el Santa María Club, un referente mundial en cuanto a instalaciones dedicadas al polo, anunció la concentración del Club Brujas, uno de los equipos históricos de Bélgica, cuyos dirigentes salieron impresionados por la calidad de las canchas de césped natural de la entidad sanroqueña.

Tras la estancia del Brujas, el Santa María dio la bienvenida el pasado día 11 al Friburgo, otro clásico europeo, de la Bundesliga alemana, que se ejercitará en Sotogrande hasta el día 16. Pero es que la cosa no queda ahí, ya que los responsables del club sanroqueño han cerrado un calendario en el que albergarán sesiones de entrenamiento de equipos de fútbol profesionales hasta el próximo 10 de febrero.

A través de unas gestiones con la empresa española Football Impact, que también mantiene relaciones con clubes de fútbol de la comarca, el Santa María se ha metido de lleno en este hospedaje temporal que pone en funcionamiento las inmaculadas canchas de polo que descansan durante el otoño y el invierno. Y es que la actividad del polo arranca con la temporada de primavera, con trofeos clásicos pero de menor rango, y alcanza su punto álgido en verano con la celebración del Torneo Internacional que acaba en agosto y que hace apenas unas semanas fue 'ascendido' de puntuación en el ranking mundial como la tercera competición de polo más importante del planeta.

Tras el paso del Friburgo, el Santa María Club acogerá del 17 al 30 de enero al Videoton de Hungría, líder de su Liga y con un técnico español al frente, el catalán Juan Carrillo, nombrado mejor entrenador de la competición húngara la pasada campaña, y con dos españoles en su nómina de futbolistas: el defensa barcelonés Álvaro Brachi y el portero malagueño Juan Calatayud, un viejo conocido de la afición del Algeciras CF, tras su fugaz fichaje el verano de 2002, en la campaña del último ascenso albirrojo a la categoría de plata de la mano del añorado José Luis Montes.

El club sanroqueño de polo anunció en su calendario de fechas que recibirá la visita del Unión Berlín del 19 al 26 de enero, del Astra Giurgiu de Rumanía del 28 de enero al 9 de febrero y del Legia Varsovia de Polonia del 31 de enero al 10 de febrero. Se puede decir que el Santa María ha colgado el cartel de completo.

El Santa María Polo Club, en una ubicación envidiable, cuenta con nueve canchas repartidas en tres zonas que reciben los nombres de Los Pinos (canchas I, II, III y IV), Río Sotogrande (canchas I y II) y Puente de Hierro (canchas I, II y III), éstas últimas junto a la zona de cuadras.

La entidad no ha parado de crecer desde que Enrique Zobel construyera el primer campo de polo en Sotogrande, la mítica cancha de La Playa en 1965. Dos años después empezaron a disputarse los primeros torneos de este deporte que comenzaba a echar raíces en la zona de forma muy familiar... hasta convertirse en lo que es hoy día, un lugar referente, una marca conocida en toda Europa y más allá.

Con esta experiencia el Santa María Club entra en un mercado de paraísos invernales que se extiende por toda la Costa del Sol hasta el litoral valenciano, con La Manga del Mar Menor con otro de los grandes epicentros para los equipos del corazón europeo. Y es que lo que para unos es un crudo invierno, para otros puede ser un auténtico verano.