Los piquetes de la huelga indefinida del metal han recorrido en la mañana de este martes el polígono industrial y comercial de Palmones, en Los Barrios, para visibilizar el conflicto laboral tras varios días apostados a las puertas de Acerinox, la principal empresa tractora del municipio. En esta ocasión, las acciones de protesta se han centrado en los talleres mecánicos, cuya actividad laboral se ampara por el convenio provincial cuya negociación permanece en suspenso, forzando su cierre. 

Un grupo de unas 60 personas, según la estimación de este periódico, ha emprendido una ronda a pie por las principales calles del polígono seguidos por un dispositivo de seguridad de la Guardia Civil. Como consecuencia de su avance ocupando la calzada, el tráfico por el parque industrial y comercial se ha visto ralentizado.

Los huelguistas han recorrido los talleres mecánicos para forzar el cese de la actividad. El sindicato CCOO apuntó el viernes que las reticencias de los empresarios del metal propietarios de pymes (talleres mecánicos y metalisterías) mantenía bloqueado el convenio frente al criterio de las contratas que prestan servicios en las grandes industrias. 

El piquete se ha personado en talleres mecánicos de varios concesionarios de automóviles. También en el de una conocida franquicia de mecánica rápida cuyos responsables han tratado, en vano, de evitar el piquete alegando que su plantilla se encuentra adscrita al sector del comercio (algo que los metalúrgicos también tienen entre sus reivindicaciones).

El paso de un piquete corta la carretera principal del polígono de Palmones, este martes.

El avance de los huelguistas se ha desarrollado generalmente sin incidentes. La marcha ha continuado hacia la zona comercial donde se ubica el multicines. En este punto, la Guardia Civil ha tenido que abrirse camino con sus vehículos todoterreno para mantener concentrados a los huelguistas y evitar su dispersión.

La mañana también ha dejado escenas anecdóticas como la protagonizada por cuatro guardias civiles y otros tantos integrantes del piquete. Los primeros se encontraban tomando café en un local de Palmones en el momento que otros tantos huelguistas se han dispuesto a hacer lo mismo. Lejos de demostrarse tensión, siquiera se han mirado.