Un hombre ha sido detenido este jueves en la playa de Puente Mayorga, en San Roque, después de embestir a un vehículo de la Guardia Civil cuando fue sorprendido alijando tabaco de contrabando.

Según han informado fuentes policiales, los hechos se han producido en la madrugada, cuando un dispositivo de vigilancia de la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras se percató de que se estaba produciendo una operación de desembarco de tabaco en la playa de Puente Mayorga.

Al aparecer en el lugar una patrulla de la Guardia Civil, la embarcación desde la que se estaba produciendo el alijo se dio a la fuga, quedando únicamente en la playa el conductor de un vehículo en el que se habían introducido paquetes con tabaco, que ocupaban todo el habitáculo, exceptuando el asiento del conductor.

El alijo de tabaco.

Al tratar de darse a la fuga, intervino también en la zona un coche camuflado de la Guardia Civil que activó las luces prioritarias para impedir la fuga del vehículo. Sin embargo, el conductor del mismo actuó de forma violenta, embistiendo al coche camuflado en su intento de huida.

Al quedar su vehículo inutilizado para circular, continuó la huida a pie, intentando escapar a nado por la playa, momento en el que fue detenido por los agentes.

La asociación profesional de guardias civiles Jucil ha reiterado su petición de dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. “Ya decíamos que, durante nuestra estancia en Cádiz por los funerales de nuestros compañeros asesinados el viernes pasado, vimos con nuestros propios ojos el movimiento de planeadoras en varios puntos de la costa gaditana y de Almería”, ha manifestado el secretario general del colectivo, Ernesto Vilariño. “Lo ocurrido esta mañana, que afortunadamente no ha tenido consecuencias para los guardias civiles, muestra una vez más cómo es de peligroso este trabajo, sobre todo en el Campo de Gibraltar, y a qué presiones están sometidos nuestros compañeros en esta zona”, ha recordado Vilariño.

Jucil remite la narración de guardias civil que asistió a la agresión. “Después de que se localizara a una embarcación que descargaba fardos en un coche, dos agentes, identificados con chalecos, se adelantan a la salida de una curva al principio de una recta con la intención de dar el alto al vehículo. El conductor con la carga no hace caso a las señales para detenerse y se da a la fuga. Al final de esta recta, a más de cien metros el vehículo oficial, en un cruce iluminado y con las luces prioritarias le cierra el paso, pero a pesar de la velocidad, el coche perseguido embiste al vehículo de la Guardia Civil y logra pasar. Unos cien metros más adelante, el conductor sale y corre en dirección al puerto, pero al ver que no tiene escapatoria, lo intenta arrojándose al agua”, explica.

 “Lo ocurrido muestra cómo de vacías y falsas han sido las declaraciones de estos últimos días del ministro del Interior Fernando Grande Marlaska, quien aún no ha dimitido pese a su más que evidente fracaso en la lucha contra el tráfico de drogas, de contrabando y de personas por el Estrecho de Gibraltar”, ha afirmado Ernesto Vilariño. “En esta ocasión, afortunadamente, los guardias civiles no han sufrido heridas durante su intervención, pero lo ocurrido expresa cómo ha aumentado la violencia de estas organizaciones mafiosas en sus operaciones. Seguimos reclamando la declaración de actividad peligrosa para el trabajo de los guardias civiles y la consideración de Zona de Especial Singularidad para todo el Campo de Gibraltar”, ha agregado el secretario general de JUCIL.

Este nuevo episodio de agresión a la Guardia Civil se produce menos de una semana después de que dos agentes perdieran la vida en el puerto de Barbate, al ser arrollados por una narcolancha, un suceso por el que fueron detenidas ocho personas de las que seis ingresaron en prisión.