Los detectives de los incendios forestales
Son quienes tratan de investigar las causas y los presuntos autores de una plaga que se ha extendido por la comarca este verano
Llevan un año que tardarán en olvidar. Paran poco en su despacho de la Comandancia de la Guardia Civil en Algeciras. Su trabajo les ha requerido muchas, demasiadas veces este verano, se vena en ola obligación de perseguir a quien, no se sabe muy bien porqué razón, se divierte poniendo en peligro vidas y el patrimonio de todos. Llevan 13 incendios en la comarca en lo que llevamos de verano. Aún queda septiembre para cerrar la temporada de mayor incidencia de fuegos pero ya han superado los 11 en los que se quedaron el año pasado. A esos hay que añadir los que se registraron en la zona de ejercicio del Cuerpo Nacional de Policía, como el de El Cobre, el más devastador de lo que llevamos de año. El sargento Francisco Rodríguez, Jefe Accidental del Seprona en Algeciras estudia sus intervenciones y trata de encontrar una explicación a conductas complicadas de entender.
Porque esa es la gran pregunta a contestar: ¿porqué alguien quema un monte? Descartada hace varios años la opción de hacer negocios que hace décadas devastó la geografía nacional, y ahora a salvo de la posibilidad de hacer negocio con la recalificación de los terrenos quemados, "en cinco años no se puede hacer nada en la zona", cabe distinguir a su juicio "el incendiario del pirómano; el primero es un enfermo que es necesario tratarse; el segundo es alguien que comete un delito y que es necesario perseguir". Este año se han vuelto a encontrar con un patrón común porque "lo que está claro es que si un fuego empieza en varios puntos de manera simultánea, la intencionalidad está clara".
Después llega el trabajo de investigación aquel que comienza siempre de la misma manera: "lo primero es asegurar la zona, por eso los agentes de seguridad son los primeros en acudir a un incendio para evitar los daños a las personas y para impedir que alguien entre en el lugar donde ha comenzado el fuego porque esa es la verdadera clave; hay que analizar dónde ha empezado para tratar de sacar pistas sobre su autoría". Lo de este verano parece fruto de una estrategia más que calculada: varios focos, una franja horaria similar y en puntos diferentes y "en días en los que soplan fuertes rachas de viento que también es importante. "A partir de ahí entran en juego diversos factores que "hace que nos encontremos con "un fuego accidental por ejemplo como consecuencia de un fallo en el tendido eléctrico, o por una negligencia como en el caso de quemar rastrojos o utilizar una máquina en el monte sin la autorización y medidas de seguridad necesarias y después están aquellos fuegos intencionados que son los que, desgraciadamente, han abundado más este verano".
El último importante, aquel que arrasó un total de 30 hectáreas en la zona del Albarracín en San Roque, responde a este patrón: "lo último que sabemos es que tuvo hasta cuatro focos de inicio". También el de Tarifa "responde a un patrón de intencionalidad ya que se aprovechó el fuerte viento que soplaba en la zona".
No quiere dar "demasiadas pistas a los autores de este tipo de hechos" pero recuerda como "hace algunos años nos encontramos con un hecho en el que una persona, iba prendiendo esas toallitas que sirven para lavarse las manos y que tienen u poco de alcohol y las iba arrojando por la ventanilla y causó varios fuegos a lo largo de su recorrido".
Esas conductas son las que se investigan para tratar de averiguar sus orígenes. De hecho, la Fiscalía de Medio Ambiente, está realizando un estudio para "identificar el perfil psicológico de estos autores" porque esa es la clave del asunto.
La otra, la "estrecha colaboración entre los distintos efectivos que participamos en la lucha contra los incendios, especialmente con la Brigada de Investigación de Incendios Forestales de la Delegación de Medio Ambiente y los efectivos del Plan Infoca; nosotros no seríamos nada sin ellos y ellos sin nosotros".
Esa coordinación les ha llevado, por ejemplo a gestionar "entre 90 y 100 denuncias en lo que llevamos de año, algo que es destacable porque la participación ciudadana a la hora de denunciar estos hechos es fundamental. Eso mismo y una investigación muy larga, nos ha llevado a la detención de dos personas como presuntas autoras de incendios intencionados. No paramos y que quede claro que todos los incendios se investigan y aunque se tarden meses, se terminará cogiendo a los autores. Por ejemplo se detuvo a una persona por un fuego originado hace cinco meses".
Lo único que espera es que su teléfono no vuelva a sonar para avisarle de una nueva intervención. Esa sería la mejor noticia.
También te puede interesar