San Roque aprueba en el pleno la subida del IBI a las grandes industrias

San Roque subirá la presión fiscal a las grandes industrias instaladas en su término municipal. El equipo de Gobierno -PSOE, PIVG y PA- sacó adelante en solitario la modificación de la ordenanza reguladora del impuesto de bienes inmuebles a las empresas (Bices). El Partido Popular votó en contra y USR se abstuvo. La propuesta municipal supone el incremento del tipo de gravamen de 1,1 a 1,3, el máximo contemplado para este impuesto y supondrá unos ingresos extras para el municipio de 1,5 millones.

El PP se opuso rotundamente a esta subida de la tasa. El portavoz del principal grupo de la oposición, Fernando Palma, señaló que no es el momento oportuno. "Son las únicas empresas que crean y mantienen puestos de trabajo", indicó el edil, quien recordó que aportan cantidades importantes durante todo el año para actividades culturales, sociales y deportivas donde el Ayuntamiento no llega.

La portavoz accidental de USR, Marina García -no asistió José Antonio Ledesma por enfermedad-, justificó la abstención de su grupo argumentando que prefiere esperar para comprobar como responderán las empresas. "Creemos también que los convenios existentes con las asociaciones se pueden resentir", añadió. Además, destacó que también puede flaquear el pacto comarcal con la industria aprobado el pasado año.

La réplica por parte del equipo de Gobierno vino por boca del concejal de Hacienda. Jesús Mayoral manifestó que el Ayuntamiento tiene que cumplir con el plan de saneamiento. "No queremos subir la presión fiscal, pero hay que cubrir servicios básicos porque si seguimos por la vía del ahorro tendríamos que cerrar el Consistorio. Además, puede ser transitorio y existe un periodo de alegaciones de un mes", indicó. En el segundo turno de palabra, Fernando Palma añadió que el Consistorio ya está cumpliendo con el Plan de Saneamiento. Además, recordó que se está revisando el padrón municipal, en el que se está haciendo un esfuerzo muy importante para la recaudación. Finalmente, señaló que la empresa E.On deberá aportar más de un millón. "La dejación existente en el Ayuntamiento ha hecho que esté funcionando sin que haya abonado aún ningún impuesto", criticó el concejal, quien aseguró que las alegaciones no son un argumento porque "por mucho que aleguen, estas empresas van a pagar". Mayoral insistió en que el Ayuntamiento debe salir adelante y abonar la deuda.

El debate lo cerró el alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, quien añadió que la coyuntura actual es muy complicada. El primer edil recordó que la anterior Corporación realizó una subida de impuesto de 0 a 36 euros y posteriormente a 110 en la tasa de la basura a los ciudadanos, así como la subida del 20% en el catrastro. "En 2010 hubo bonificaciones, pero no en 2011. Esto supone una subida mayor que esta tarifa a las empresas. Se trata de equilibrar los impuestos y que tengan una subida similar y por eso le doy mi apoyo", apuntó.

Finalmente, destacó que cuando el Consistorio recobre la normalidad otras corporaciones valorarán si hay que continuar o baja la tasa.