Eguiguren: "El fin de ETA surgió de los escombros de la T-4"

La explicación de las causas del fin de la violencia terrorista en Euskadi centra la ponencia inaugural del expresidente del PSOE en Euskadi Asegura que el proceso duró cinco años

Eguiguren ante la mirada atenta de Ruiz Boix, ayer en el Palacio de los Gobernadores.
Eguiguren ante la mirada atenta de Ruiz Boix, ayer en el Palacio de los Gobernadores.
Y. G. T. San Roque

19 de julio 2016 - 01:00

El expresidente del Partido Socialista de Euskadi, Jesús Eguiguren, ofreció ayer la conferencia inaugural de los Cursos de Verano en la que explicó el fin de ETA y el proceso de paz, vivido en primero persona, ya que participó en las reuniones que se celebraron durante años en la clandestinidad hasta llegar al 20 de octubre de 2011, cuando ETA anunció el cese definitivo de su actividad armada después de cuatro décadas.

Tras su presentación por el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, recordó a aquellos que sufrieron el terror de los atentados y fueron víctimas como José Manuel Rekalde, exconsejero vasco recientemente fallecido, y especialmente al concejal del PP Miguel Ángel Blanco.

Eguiguren indicó que es muy difícil explicar en una conferencia todo el proceso. Señaló que cuando los terroristas entran a negociar en realidad "están empezando a asumir su derrota, a reconocer que no van a conseguir lo que quieren y que tendrán que integrarse".

El expresidente del PSOE en el País Vasco, señaló que el terrorismo de ETA era muy especial, de ninguna manera era marginal sino de clase media y pudiente a la que luego se unieron emigrantes que habían nacido en el País Vasco y que entraron en ese mundo como fenómeno de integración. "Era un terrorismo VIP", indicó y señaló como ejemplo: "en las conversaciones de Noruega nos visitó el ministro de Asuntos Exteriores de ese país, quien dijo que había participado en un montón de procesos de paz y nunca había visto a los terroristas de punta en blanco y al representante del gobierno, que era yo desaliñado". Eguiguren destacó que el terrorismo islamista de Madrid les afectó y también el trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. "En sus inicios ETA tenía mejores armas que la Guardia Civil pero eso cambió y la gente era muy experta", señaló.

"El fin de ETA surgió de los escombros de la T-4, lo pararon los históricos que habían estado en la cárcel y sus bases también pidieron que parara", opinó el socialista y actual catedrático de Derecho.

Las conversaciones por la paz comenzaron en el año 2000 sin que nadie lo supiese. "Yo estaba harto de los pactos antiterroristas y había cierto malestar en el País Vasco porque se estaba asumiendo que el terrorismo era un problema que tapaba a otros problemas y algunos pensábamos que además de la unidad de los partidos faltaba algo, era una sensación en la que yo estaba", explicó el socialista, quien aseguró que tuvo que reconocer al primer cadáver socialista y enterró al último.

Confesó que en sus primeras conversaciones con Arnaldo Otegi, le dijo "vas para los 60, no tienes donde caerte muerto y yo tampoco, no has ganado nada ni nosotros y no debemos dejar a nuestros hijos un problema de nuestra generación". En estos encuentros, que se llevaban a cabo cada semana, le pusieron en actitud de rebeldía frente a su propio partido, y desveló distintos detalles de cómo se desarrollaron las conversaciones, llegando a tildar de "burócratas" a los miembros de ETA, porque insistían en que se firmara un documento en el que se reflejara el fin de la lucha armada y el paso de las sus reivindicaciones a la arena política.

"Pasaron cuatro años en los que no se veía luz y justo entonces ganó José Luis Rodríguez Zapatero las elecciones y se nos abrió el cielo. La misma noche electoral le dije a Otegui que teníamos que hacer cosas", añadió Eguiguren, quien indicó lo que le costó hablar con el presidente y posteriormente con Alfredo Pérez Rubalcaba -asignado por Zapatero-, "que lo entendió todo en cinco minutos".

Aún duró un año las negociaciones con encuentros en Ginebra y Noruega hasta llegar finalizar con el cese definitivo de la actividad armada.

En abril de 2013, Eguiguren y el exportavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, fueron galardonados con el premio Gernika por la Paz y la Reconciliación por "su aportación en la consecución de la Paz en Euskal Herria".

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