La Sección Séptima de la Audiencia de Cádiz, con sede en Algeciras, ha suspendido este lunes el juicio contra Jesús Heredia Heredia, el Pantoja, considerado uno de los principales capos del tráfico de hachís en el Campo de Gibraltar, para evitar que el proceso fuera declarado nulo.

El juicio, una de las principales macrocausas juidiciales contra las redes de tráfico de hachís en el Estrecho de Gibraltar, ha sido aplazado cuatro meses, hasta el próximo 1 de febrero, después de que José Manuel O. F., uno de los quince acusados que se sientan en el banquillo con el Pantoja, renunciara súbitamente a su abogado defensor apenas un día antes del comienzo de la vista oral.

"Para mí que mi abogado no se había leído el sumario", ha justificado el acusado para explicar la renuncia a su defensor, una decisión que ha molestado tanto al tribunal como a la Fiscal Antidroga de Algeciras, Macarena Arroyo, que han puesto de manifiesto "el gran esfuerzo" que supone organizar un juicio con tantos acusados y tantos letrados para que tenga que ser suspendido.

La presidenta del tribunal ha señalado que se admitía la renuncia al abogado para evitar que la sentencia fuera declarada nula si la vista seguía adelante y el acusado recurría después por su indefensión.

Y ha advertido a los acusados de que, en adelante, no admitirá ninguna renuncia a sus defensores si no se hace con el tiempo suficiente para que el nuevo abogado se estudie el proceso.

Javier Muriel, abogado del Pantoja, para quien la Fiscalía Antidroga pide trece años de prisión y doce millones de euros de multa en este proceso, ha señalado a EFE que la suspensión provoca "un serio problema" también a su cliente. "Él quería afrontar ya el juicio, demostrar su inocencia cuanto antes y volver a rehacer su vida".

Esta vista era la primera "macrocausa" contra el narcotráfico en el Estrecho que llega a juicio desde que en el 2018 se pusiera en marcha el Plan Especial contra el Narcotráfico en el Campo de Gibraltar, proyectado por el Ministerio del Interior para poner freno al fenómeno de las redes que llevan hachís desde Marruecos a la costa de Cádiz.

Para Jesús Heredia, que hasta ahora sólo tenía antecedentes penales por delitos contra la Seguridad Vial, era la primera vez que se sentaba ante un tribunal para responder por su supuesta relación con el tráfico de hachís, al que, según fuentes policiales, se dedica desde su adolescencia.

El líder del clan de los "Pantoja se inició haciendo labores de vigilancia y logística para Abdellah El Haj, alias el Messi del hachís, y fue escalando puestos y ganándose su confianza hasta convertirse en su mano derecha, según los investigadores.

Se convirtió después en uno de los sucesores del Messi, cuando éste, que continúa huido de la Justicia, necesitó pasar a un más discreto segundo plano.

Hasta tal punto que el 24 de mayo del 2020, cuando el Pantoja fue detenido mientras estaba con su familia en un restaurante de una zona de lujo de Chiclana de la Frontera, la Policía le definió como el capo más importante de la droga en el Campo de Gibraltar en aquel momento y la persona que controlaba la práctica totalidad del transporte de hachís desde Marruecos a Cádiz.

Fue arrestado un mes después de que escapara de una redada en la que fueron detenidos 36 integrantes de su clan y en la que se intervinieron 4,3 toneladas de hachís.

En el juicio al que se enfrenta ahora la fiscal antidroga pide dos años de prisión por un delito de pertenencia a grupo criminal, seis años de prisión y multa de doce millones de euros por un delito contra la Salud Pública, tres años por tenencia de armas y otros dos por receptación, por el uso de coches robados para mover los alijos y que en alguna ocasión han utilizado para embestir a una patrulla que les perseguía.

El Pantoja, que quedó en libertad bajo fianza de 30.000 euros por esta causa, tiene otros dos casos pendientes por los que también está en libertad provisional.