Acerinox acepta las demandas del comité y pedirá 10 meses de ERTE

La dirección de Acerinox pedirá a la Junta de Andalucía que el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de Acerinox dure finalmente diez meses a cambio de asumir todas las demandas del comité de empresa en lugar de los nueve que, como máximo, se habían planteado inicialmente. Es el principal acuerdo al que llegó ayer la comisión negociadora en el transcurso de una reunión donde Acerinox estuvo representada por el secretario general de la compañía, Luis Jimeno, en calidad de asesor.

Los tres sindicatos con representación en el comité de empresa (UGT, CCOO y USO) anunciaron a través de un comunicado conjunto que Acerinox quiere cerrar los detalles de la aplicación del expediente lo antes posible para que pueda entrar en vigor, si así lo autoriza la delegación provincial de Empleo, a partir del 1 de marzo y prolongarse hasta final de año. Previamente, el documento que vaya a presentar la empresa incluyendo los acuerdos deberá ser votado en la asamblea de trabajadores.

El comité de empresa, satisfecho por esta primera muestra de consenso, destacó que la compañía ha aceptado en su práctica totalidad el decálogo de medidas presentado el viernes donde se incluían demandas como el cobro íntegro de los salarios durante los periodos de desempleo y viabilidad para el futuro de la factoría.

Sólo dos de las diez medidas plantearon dudas en la empresa en cuanto a la posibilidad legal de su aplicación. Acerinox se comprometió, según el comité, a consultar a Empleo si es factible gestionar los periodos de desempleo con pago delegado -un solo cobro al mes- y los efectos en los trabajadores a turno parcial y relevistas para incluir estos dos puntos. Acerinox, en caso de obtener el visto bueno de la administración laboral al ERTE, pretende operar hasta final de año con el 50% de la plantilla regulando los departamentos por quincenas y de forma solidaria -a todos por igual-. Esta aplicación, dada las particularidades de la factoría, se llevaría a cabo de manera escalonada en algunas secciones para poner en marcha los equipos e incorporar a los trabajadores de forma paulatina. Laminación en caliente se incorporaría a los cuatro días de iniciarse la regulación y laminación en frío, a los siete. La dirección consultará a todos sus departamentos cuánta plantilla necesitan en cada momento para operar al ya referido 50% de capacidad para establecer el organigrama de trabajo y computar cuántos trabajadores podrán acceder a la factoría. Este proceso de organización interna se iniciará esta misma semana de cara a un próximo encuentro, el viernes, donde matizar todas las cuestiones pendientes.

En virtud de este acuerdo, los trabajadores de Acerinox tendrían garantizada la percepción íntegra de sus salarios -incluyendo los complementos- mientras permanezcan en el paro. El 70% de los costes salariales, hasta un máximo de 1.300 euros por trabajador, sería asumido con cargo al Instituto Nacional de Empleo (Inem) en calidad de prestaciones. El resto del salario sería pagado por la empresa.

Las pagas extraordinarias y la prima de producción -un mínimo de 300 euros al año- estarían también garantizadas con independencia de las cotas de producción. Si al finalizar el ejercicio se calcula que los empleados deben recibir más de estos 300 euros, percibirían la cantidad correspondiente.

Uno de los principales acuerdos de ayer, según el presidente del comité de empresa, Francisco Mora (UGT), es que la compañía se ha comprometido a no incluir en el ERTE a los eventuales con menos de dos años de antigüedad en la empresa porque no tendrían garantizado un periodo tan largo de prestaciones por desempleo. Además, a partir de la entrada en vigor de la regulación, la empresa renovaría a todos los eventuales cuyos contratos expiren hasta final de año -unos 50-, por lo que la plantilla se mantendría estable.

Del mismo modo, la compañía accedió a crear una bolsa de empleo para recontratar a todos aquellos que ya se hayan quedado sin empleo por orden de antigüedad cuando la situación productiva vuelva a cifras normales.

Acerinox también devolvería las vacaciones que la plantilla adelantó en diciembre, quedando pendiente cómo hacerlo. Finalmente, las inversiones y el empleo derivado se mantendrán. El comité solicitó que el plan de viabilidad sea adjuntado al ERTE.

Francisco Mora consideró que la valoración de este trabajo conjunto de los sindicatos deberá ser realizada por la plantilla en la asamblea, si bien indicó que aporta mucha tranquilidad y garantías puesto que existen actas firmadas por las partes de todos los encuentros mantenidos hasta ahora. "Uno de los aspectos más importantes es que el nivel de plantilla está garantizado porque se va a renovar a los temporales cuyos contratos expiren entre marzo y diciembre", destacó.

Por su parte, la vicepresidenta del comité, Francisca Candea (CCOO), dijo que ampliar a diez meses la regulación a cambio de aceptar todas las propuestas sindicales es razonable y, según su criterio, viable ante Empleo. "Ha habido y hay talante negociador", sentenció.

La empresa, por su parte, subrayó a este diario que la buena sintonía ha marcado el proceso en aras de buscar soluciones beneficiosas para ambas partes y confió en una resolución rápida de la situación, en un plazo de dos semanas, como máximo. Francisco Mora también incidió en este aspecto. "Hay que tener en cuenta que operar con toda la plantilla cuando apenas hay pedidos ni visos de que la situación mejore a corto plazo supone unos altos costes para la empresa que ahora podrán repercutirse en el compromiso de abonar todos los salarios", concluyó.