El Écija Balompié se desplaza a La Línea alentado por su mejor comienzo liguero de la historia tras haber sumado los mismos puntos que lleva la Balona: diez de doce. Los astigitanos están de vuelta en una categoría en la que han militado veinte campañas. Juan Carlos Gómez tutela una plantilla que mantiene el bloque del ascenso y que hoy no podrá contar por sanción con el delantero Juan Delgado.

La ilusión se ha apoderado del rival de hoy de la Balona. Un histórico del fútbol andaluz como el Écija vive un momento dulce tras su retorno a la Segunda B. Los azulinos, con los mismos números que los albinegros, firman su mejor arranque en la categoría, que hasta el momento lo tenían los registros de las andaduras 2002-03 (Paco Chaparro) y 2005-06 (Miguel Rivera), cuando sumaron nueve puntos de doce. Con Rivera estuvieron a punto de clasificarse para la liguilla de ascenso.

El Écija llega impulsado por la plácida victoria lograda ante el Lorca Deportiva (2-0). Los de Gómez arrancaron la temporada con sorpresa en Murcia (0-1), vencieron al Badajoz (2-1) en su debut en el San Pablo y empataron en Sevilla ante el Betis Deportivo (3-3). Este arranque supone el mejor de un recién ascendido en toda la categoría junto al Rápido de Bouzas.

Gómez suele apostar por una defensa de tres aunque en Sevilla jugó con cuatro. El entrenador guarda con celo la convocatoria y sólo tiene la baja del ariete Juan Delgado.

Entre los fichajes destacan el veterano Jonathan (35 años), de vuelta a casa tras una larga carrera en Segunda B, y los jóvenes atacantes Escardó y Canillas.

"Es un duelo entre dos equipos que están bien y para nosotros es una buena piedra de toque", señaló Gómez, que destaca en la Balona que es "un equipo que hace muy bien las transiciones de defensa a ataque, busca las bandas, que las tiene rápidas, a través de su jugador con más calidad que es Sergio Molina y luego tiene argumentos arriba".

"La Balona te mete presión arriba, sobre todo en casa. Va a intentar anular nuestra salida de balón, por eso es importante ser capaces de controlar los primeros diez-quince minutos y poder exponer nuestro fútbol, pero también hay que tener mucho cuidado con las pérdidas", opina el técnico.