El alcalde de Tarifa, Juan Andrés Gil, se pronunció ayer sobre los actos vandálicos sufridos en la cueva Paloma de Tarifo, cerró así filas sobre la necesidad de su protección. En unas declaraciones realizadas a Radio Algeciras, en la que también se esperaba contar con la "voz" de la delegación territorial de Cultura, que mantuvo su silencio habitual, el primer edil tarifeño subrayó que "tenemos que reaccionar con la mayor celeridad posible".

Gil precisó que el Ayuntamiento está muy preocupado ante estos daños antrópicos que vienen sufriendo los abrigos rupestres del Campo de Gibraltar y, especialmente, de la ciudad. Señaló que tiene pendiente una reunión con la delegada territorial de Cultura, Cristina Saucedo, en la que espera abordar de forma conjunta una futura solución de cara a la seguridad y protección del patrimonio.

Destacó que se trata de un labor conjunta, aunque sí es cierto que la mayoría de los abrigos están en fincas privadas, precisó que no cree que nadie ponga impedimento a tomar medidas de protección en al menos las más cercanas a los núcleos urbanos. "Estamos en el momento de hacer alguna acción de protección".

Recordar que la semana pasada este diario se hizo eco de los daños sufridos en la cueva Paloma de Tarifa. Unos senderistas advirtieron unas pintadas sobre las señales rupestres, derivando la denuncia pública a la viuda de Lothar Bergmann. A partir de entonces colectivos como Agedpa, el Instituto de Estudios Campogibraltareños, La Trocha o Academus se han sumado a las críticas por lo ocurrido.

Asimismo, incluso los propios ciudadanos han lanzado un manifiesto destinado a la delegación territorial de Cultura para que se haga eco de esta problemática y piden, entre otras cosas, que se cree un parque arqueológico del Arte Sureño. Además, están recogiendo firmas para ello.