Cuando el agua se pone por delante de la crispación

El Gobierno central y la Junta mantienen abierto un diálogo sobre inversión en las infraestructuras hídricas

Mil obras hídricas en Andalucía para reducir el gasto de agua y torcer el brazo a la sequía

Reunión entre el Ministerio de Transición Ecológica y la Junta de Andalucía
Reunión entre el Ministerio de Transición Ecológica y la Junta de Andalucía / E.P.
Stella Benot

21 de junio 2024 - 07:00

En el clima de confrontación y crispación política reinante también hay espacios para el diálogo y el acuerdo, incluso cuando hay mucho dinero encima de la mesa. Esta semana se han visto en Madrid el secretario de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Transición Ecológica, Hugo Morán, y el consejero de Sostenibilidad y también de Agricultura por el momento, Ramón Fernández-Pacheco.

En el ambiente de la reunión flotaba, cómo no, el Pacto por Doñana que ambos lograron poner en marcha. Hay especial interés por mostrar que la sintonía que ambas partes mostraron para llegar a un acuerdo tan complicado sigue adelante. Que no se han roto los consensos entre las dos principales administraciones... por más que hay preocupación por cómo acogerá el territorio las primeras ayudas a los agricultores. Unas ayudas que, por cierto, saldrán en breve.

El encuentro era para tratar las infraestructuras hídricas pendientes, que son clave para Andalucía no sólo para el consumo de boca sino también para mantener la industria agroalimentaria.

La Sociedad Estatal de Aguas, Aquadmed, está asesorando a los usuarios de las comunidades que están elaborando varios proyectos que el Gobierno andaluz considera estratégicos: las desanilizadoras del Bajo Almanzora II y la Axarquía, la desalinizadora de aguas salobres de la comunidad de regantes de Cuevas del Almanzora, las conexiones del agua desalinizada Campo de Dalías con los municipios del Poniente Almeriense, así como la ampliación de la desalinizadora de aguas salobres de Atabal. 

Hugo Morán se ha comprometido a tener el mismo tratamiento con las desaladoras pendientes en Andalucía y Cataluña (aquí hay un nuevo frente abierto con sospechas de privilegios para los catalanes) y por ello una vez que esté el anteproyecto y el suelo disponible para ello, el Gobierno licitará “inmediatamente” la ejecución de los trabajos, de forma conjunta para el proyecto y la obra para así agilizar los plazos.

 En el caso de la desaladora del Valle del Almanzora los trabajos van “muy avanzados” en la redacción del anteproyecto y el suelo está identificado; en la Axarquía van “un poco más retrasados”. 

Un plan de trabajo que comparten desde el Gobierno andaluz que demanda que se cumpla con la ejecución de las obras declaradas de interés del Estado.

La presa de Rules

Otro problema diferente es el de la presa de Rules. La Junta quiere que las fases pendientes se acumulen en dos proyectos generales para agilizar los plazos. El pasado martes se publicó el estudio de impacto ambiental de uno de los proyectos desglosados y ahora falta licitar el proyecto.

Es un tema muy sensible en Andalucía, una reivindicación histórica sobre la que hay reticencias; en la Junta todavía no se creen que se vaya a materializar. Porque hay un problema de falta de fondos para una gran infraestructura como esta. En el primer proyecto, los usuarios se han comprometido a pagar un 20% de las obras, una cantidad similar a la que se debería cobrar a los que están demandando los proyectos que faltan. 

Aguas regeneradas

Uno de los retos pendientes en materia hídrica es el uso de las aguas regeneradas, una estrategia clave para Andalucía que ha mejorado su situación de extrema sequía pero que sigue con un grave déficit de agua.

El Ministerio y la Junta están de acuerdo en la necesidad de unificar criterios y en procurar la creación de un grupo de trabajo bilateral que permita la coordinación de las estrategias española y andaluza para concretar qué obras serán de interés del Estado y cuáles de Andalucía.

En donde ya no hay tanto acuerdo es en los trasvases. El Gobierno andaluz está a su favor mientras que desde el Ministerio para la Transición Ecológica no lo tienen tan claro. La Junta quiere un trasvase del Negratín al Almanzora y también del Tinto-Odiel y Piedras al Chanza, pero , de momento, no hay avances.

stats