El operativo antidroga del Botavara sirve para acabar con una red internacional

La actuación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Nacional desarrollada el pasado fin de semana en la playa de El Rinconcillo, en la zona del Botavara, sirvió para desarticular una supuesta red de narcotráfico internacional, que trasladaba hachís desde la costa de Marruecos hasta la Bahía de Algeciras. La Operación Stasi arrancó en enero, según explicaron ayer fuentes de la Benemérita, cuando efectivos de ambos Cuerpos detectaron la existencia de una organización "perfectamente estructurada" afincada en Algeciras y que utilizaba diversos tipos de embarcaciones para introducir la droga.

La Guardia Civil describió ayer una red delictiva que tenía distribuida las funciones entre sus integrantes. Por una parte existía unos cabecillas, que dirigían al resto de la trama en el Campo de Gibraltar y que mantenían contacto con Marruecos para obtener la mercancía. Un segundo grupo se encargaba de adoptar medidas de seguridad durante los alijos: los implicados se distribuían por los alrededores del punto de desembarco para detectar la llegada de cualquier vehículo y, además, vigilaban el movimiento de las patrulleras del Servicio Marítimo. Otro grupo de personas descargaban de la mercancía y la introducían en los automóviles. Y, por último, otras personas se dedicaban a pilotar las embarcaciones.

La supuesta banda de narcos intentó introducir partidas de hachís en varias ocasiones, las cuales resultaron fallidas. De hecho, la red perdió dos veces la mercancía durante la travesía, debido a que las embarcaciones sufrieron accidentes. Finalmente, para la madrugada del sábado al domingo del pasado fin de semana, se supo que se desembarcaría hachís en la playa de El Rinconcillo y se desplegó un operativo especial con efectivos de la EDOA de la Guardia Civil y de la Udyco y del Greco de la Policía Nacional -una treintena de agentes-.

Dos vehículos todoterrenos accedieron sobre las 06:30 horas a la zona de costa, mientras una neumática arribaba al litoral y un grupo de personas -que se hallaba oculto en las inmediaciones- procedían a descargar la droga. Los efectivos policiales iniciaron entonces la actuación. Los agentes arrestaron a seis personas que participaban en el desembarco del hachís, a dos miembros encargados de la "seguridad" del alijo y a los supuestos cabecillas de la trama, que se encontraban en un vehículo.

Las fuerzas de seguridad intervinieron en la playa 570 kilos de hachís, repartidos en 19 fardos; e interceptaron dos Land Cruiser sustraídos en Málaga. Por su parte, la embarcación emprendió la huida y la Guardia Civil inició su búsqueda. El operativo, desplegado para impedir que lograran desembarcar la droga que aún quedaba, se dirigió a Puerto Chico (La Línea), donde se intervino un Jeep Cherokee -sustraído en Alemania y que se encontraba en marcha y con las puertas abiertas-. La Benemérita informó que los narcos optaron por arrojar la mercancía al mar y embarrancar la nave en la playa de Tonelero, donde se dieron a la fuga.

Tal y como publicó ayer este diario, un narco agredió a un agente de la Udyco durante el operativo. Por su parte, las fuerzas policiales efectuaron tres registros domiciliarios -dos en Algeciras y otro en una nave de Campamento- e intervinieron un remolque para barcas. El Juzgado de Instrucción número 3 de Algeciras dirigió la operación.