"Esta medalla es para todos los que ayudan a sacar adelante La Piñera"

El padre Pedro, como le conoce todo el mundo en La Piñera, no para de abrir la puerta del despacho parroquial donde los vecinos llaman para hablar o pedir ayuda y eso si no suena el teléfono. La parroquia el Espíritu Santo está siempre abierta a todos.

-¿Cómo se entera de que va a recibir la Medalla de la Palma?

-Me llamó Inmaculada Nieto diciéndome que la Comisión de Cultura del Ayuntamiento proponía al pleno que una de las medallas se me concediera a mí y me pidió por favor que aceptara.

-¿Qué sensación le produjo?

-Me sorprendió muchísimo ya que entiendo que hay mucha gente merecedora de ella. No obstante, me ha hecho sentirme mucho más algecireño porque yo soy gaditano y esto me hace vincularme más con esta ciudad.

-¿Cuántos años lleva aquí?

-Llevo 35 años en La Piñera. Desde el 14 de enero de 1976 compartiendo el trabajo de la parroquia con la enseñanza de religión, diez años en el instituto Isla Verde y 24 en el Saladillo. A mi me engancha esta ciudad porque me engancha este rincón. Siempre he descubierto en la gente de aquí una calidad humana impresionante. Me sienta mal cuando escucho hablar con desprecio de La Piñera, "ese será de La Piñera" porque la gente de aquí es buena y sencilla.

-¿En esta parroquia Cáritas es un pilar importante?

-Cáritas trabaja en todas las parroquias de Algeciras. Aquí en La Piñera siempre ha tenido un trabajo muy importante pero ahora con la crisis todavía más.

-¿Cuándo empeora la situación?

-Cáritas siempre ha necesitado mucho esfuerzo y trabajo en esta parroquia. Antes eran un grupo de familias las que se atendían pero últimamente ha aumentado considerablemente la asistencia por la crisis por la llegada de inmigrantes sobre todo marroquíes.

-¿Cuál es la principal lucha?

-La atención prioritaria: alimentos, recibos de luz, entre otros. Pero no nos podemos olvidar del centro de promoción para la mujer donde participan también inmigrantes. Se les da alfabetización, corte y confección, manualidades y hay un psicólogo que imparte habilidades sociales, autoestima y una escuela de padres.

-¿Cómo se surte Cáritas para ayudar a los más necesitados?

-Fundamentalmente del Banco de Alimentos, que realiza un gran trabajo y de Cáritas local de Algeciras que no sólo atiende el Comedor del Carmen también ayuda a las parroquias y nos echa una mano, si pueden.

-¿Las personas vienen a cualquier hora pidiendo ayuda?

-Antes teníamos un día dedicado a la atención. Ya no porque esto es continuo. Para dar las ayudas hay unos días determinados, tiene que estar organizado. Se atiende sobre todo en el despacho parroquial pero también en la calle en cualquier circunstancia y momento.

-¿Cuántos voluntarios hay?

-Hay 14 personas. Voluntarios puros y duros que dedican muchas horas a ayudar a los demás. Son la mayoría de La Piñera y los hay que aunque ya no viven aquí se sienten miembros de esta comunidad. Gracias a esas personas esto sale adelante. Con la Medalla de la Palma ya se lo he dicho a ellos, la cojo pero en esta medalla cabe muchísima gente porque hay una labor que no es solo mía, por eso pertenece a los miembros de Cáritas, al grupo Scout y a los catequistas. Este voluntariado no se ve en las oenegés. Porque como se hace desde una opción de fe pues se hace gratuito y a cambio de nada. Son horas y horas. No se ha profesionalizado y eso es importante.

-¿Esta parroquia funciona gracias a los vasos comunicantes?

-Exactamente. Existen situaciones de pobreza que las percibimos por los catequistas, que son muy sensibles y por los profesores de los tres colegios de La Piñera, que nos ponen sobre la pista. Hay un maravilloso equipo de profesores implicados en el barrio para que entre todos esto salga adelante.

-¿Qué es lo más duro que has visto en este barrio?

-Lo peor ha sido el tema de la droga. Hace más de 30 años se hizo presente y dio muy fuerte a muchas familias. Es una etapa muy dura porque ha habido muertes y eso es irreparable.

-¿Cómo se previene esto?

-Ahora hay mucha información pero cuando esto irrumpe lo único que hay en el barrio es el grupo Scout por donde han pasado todo los niños. Muchos de esos chavales me reconocen que gracias a ese grupo no cayeron en la droga. La labor de los Scout fue inmensa porque entonces no había ni Barrio Vivo ni Alternativas, no había nada.

-¿Qué opina de quienes abogan por quitar los crucifijos?

-A mi me parece una insensatez. Y lo es porque Jesús no es patrimonio ni de una iglesia ni de una religión, es patrimonio de la humanidad. Por este motivo tiene que estar en todos los lugares donde se esté aprendiendo. Hoy más que nunca los valores de Jesús son un referente. Tener la presencia de un hombre que dio su vida por todos es un modelo para las personas de buena voluntad, sean de la religión que sean y aunque no tenga religión. Jesús es de todos.

-¿La parroquia se llena?

-No. La iglesia no se llena. Se llena en bodas, comuniones, en acontecimientos extraordinarios. La iglesia Espíritu Santo es muy grande, todo hay que decirlo. Pero hay gente que aunque no viene a los actos litúrgicos cuenta con la parroquia para otras cosas y eso es bueno.

-¿Cuál es su postura sobre el bebé medicamento?

-Como me parece una insensatez el rechazo de la cruz por lo que significa me parece una insensatez cuestionar el bautizo de este niño. Ese bautizo tenía muchísimo sentido. Estaría bueno negarse. Esos padres con lo que pasaron y lucharon. Dios va a bendecir todo lo que es bueno y lo que ayude a vivir con autenticidad.

-¿Qué retos tiene la iglesia?

-Hay que corregir la escasa presencia en la vida social y política para evitar la sinvergonzonería, yo creo que las circunstancias en España están llamando a los cristianos a regenerar la vida política. Esos son los grandes pecados, los pecados sociales. Como dice el Evangelio, luz del mundo y sal de la tierra. Porque la vida está perdiendo sabor con tanta granujería.