Algeciras es una ciudad de paso pero también de acogida. Sus más de 104 nacionalidades la convierten en un punto intercultural óptimo no sólo para asentarse sino para lograr refugio. Desde hace tres años la fundación Cepaim tiene su propia sede en la localidad, de las nueve que alberga en toda Andalucía y más de 30 a nivel nacional. Su labor sirve para dar apoyo y asilo a las personas refugiadas.

En el año 2016 Cepaim atendió en Algeciras a 114 personas de diferentes perfiles. Los solicitantes de protección internacional ya disponen de tarjetas de demandantes de asilo y refugio y, en algunos casos, llegan incluso con autorización para trabajar.

En el caso de las personas procedentes de centros de internamiento o de estancia temporal de inmigrantes -CIE o CETI- están en una situación administrativa irregular, pero tienen sus necesidades básicas cubiertas y logran pornerse en contacto con sus redes familiares y de apoyo. Otras personas están documentadas y en situación de búsqueda activa de empleo o formación.

Cepaim es una organización independiente que da respuestas a las dinámicas sociales relacionadas con el hecho migratorio y con los procesos de exclusión social. Sus inicios en Algeciras fueron en un primer momento con dos dispositivos de acogida con capacidad para 12 plazas. Hoy cuenta Cepaim con ocho y atiende las necesidades de 38 personas -personas solas y familias- tanto demandantes de protección internacional como procedentes de los CIE o CETI (Ceuta y Melilla).

En Algeciras la sede del colectivo se sitúa en la urbanización Villa Palma y está abierta al público de lunes a jueves de 9:00 a 15:00 y de 15:30 a 19:30, además de los viernes de 9:00 a 14:30.

En las últimas semanas han estado atendiendo a tres familias, en total a diez personas, en el marco del programa de protección internacional procedentes de Ucrania, Azerbayán y Venezuela. Y por otro lado dan asistencia a más de 84 personas desde la acogida del Real Decreto 441/07 de Ayuda Humanitaria y doce en acogida temporal -en este caso son jóvenes extutelados por la Junta de Andalucía a través de los centros de menores-.

El coordinador de Cepaim en Algeciras reconoce que no es fácil la integración en la sociedad algecireña "pero tampoco imposible". Desde la fundación tienen mucho trabajo por hacer en cuanto a la generación de "entornos inclusivos y que Algeciras deje de ser un lugar donde es más fácil identificar numéricamente a las personas procedentes de otras culturas que cualitativamente en cuanto al cambio de las estructuras y con respecto a la integración".

Cepaim no sólo da apoyo humanitario a las personas que asiste. Realiza itinerarios individualizados, acompañamientos (jurídico-administrativo, sanitario, educativo, sociocultural), talleres formativos y orientación laboral, diagnóstico y seguimiento psicosocial, formación en lengua y cultura española, salidas socioculturales, talleres de habilidades sociales, domésticos y de convivencia en diversidad.

Como ejemplo en la actividad que desarrollan en Algeciras está el colectivo ecologista Agaden que programó durante este curso actividades junto a Cepaim, especialmente enfocadas a la naturaleza, como dos talleres de senderismo en los parques naturales de Los Alcornocales y del Estrecho llevando a cabo rutas senderistas con personas provenientes de países como Azerbaiyán, Venezuela, Mali, Cameron o Guinea.

Cepaim trata de ser un referente práctico y teórico en la aplicación coherente de políticas transversales de interculturalidad, gestión de la diversidad, género y codesarrollo tomando como base el territorio. La visión de la fundación es promover un modelo de sociedad intercultural que facilite el acceso pleno a los derechos de ciudadanía de personas migrantes, desarrollando políticas de lucha contra cualquier forma de exclusión social y colaborando en el desarrollo de sus países de procedencia.

Los principales valores de Cepaim son la justicia social, la interculturalidad, el compromiso con la población que se encuentra en situaciones de mayor vulnerabilidad, así como la igualdad de oportunidad y no discriminación, la solidaridad, la gestión de la diversidad, entre otros aspectos.