El instituto Isla Verde saca su mirada de las aulas y se acerca a la realidad
Noventa alumnos participan en cuatro proyectos que analizan la importancia del agua, el papel de la mujer, las economías y crean una asociación. Han sido reconocidos con el premio Vicente Ferrer
La profesora de Economía Marisol Aneas quería que sus alumnos miraran al mundo más allá de las paredes de las aulas, que aprendieran, que se divirtieran y que sobre todo se acercaran a la realidad. Su experimento ha activado en los estudiantes un sentido crítico del que antes creían carecer y encima le ha valido al instituto Isla Verde el premio nacional de Educación para el Desarrollo Vicente Ferrer.
90 alumnos de 4º de ESO y de 1º y 2º de Bachillerato participaron el pasado curso en cuatro proyectos que han formado parte de un todo novedoso. El primero se denominó Murales Económicos. En él los estudiantes analizaban artículos de prensa que versaban sobre realidades socioeconómicas. La actualidad les llevó a los episodios de los piratas somalíes o a la inmigración y a encontrar vínculos insospechados en frentes noticiosos aparentemente lejanos. Lo de murales viene porque cada semana colgaban en las paredes los hechos más relevantes. Al final del curso realizaron un seguimiento de los problemas.
En el tercer trimestre, Aneas creyó que ya les había enseñado el camino y consideró que tenían que marcar el suyo propio. Por eso los estudiantes tenían que visionar diferentes medios para estudiar las noticias. Nació de esta manera Cuadernos Viajeros de Economía, que sirvió para que muchos descubrieran por ejemplo la radio y para comprobar que los mismos problemas son tratados en cada uno de los formatos mediáticos. Los grupos iban rotando e intercambiaban experiencias en el patio del centro.
Llegó el segundo trimestre y con él las jornadas culturales, que llevaron por título El agua como fuente de vida. Fue el tema del tercer proyecto ganador. Los alumnos estudiaron los problemas del agua y la profesora de Economía pretendía ir un poco más allá tocando la concienciación. Para ello los estudiantes tenían que grabar situaciones de la vida cotidiana, como lavar un coche, del buen y mal uso del agua. Los móviles jugaron un papel fundamental. De aquí salió un resumen en imágenes, en el que los estudiantes eran los propios protagonistas.
La cuarta experiencia estuvo enmarcada en la iniciativa de Jóvenes Emprendedores Solidarios. Lo que hicieron fueron trabajar en un problema social en colaboración con la onge InerRed. De aquí nació la asociación Un mundo para todos y el proyecto Si la mujer avanza, el mundo también. Sirvió para estudiar el papel de la mujer a lo largo de la historia y los problemas locales. Lo enseñaron en la feria de Emprendedores Solidarios de Sevilla e incluso recaudaron algo de dinero, "aunque el fin era concienciar", precisa la profesora de Economía.
De todo y como reflexión y compendio surgió el proyecto Mirando a todo: ayer, hoy y mañana. Todo este esfuerzo se ha visto compensado con el premio nacional de Educación para el Desarrollo Vicente Ferrer, que ha llevado a Aneas y a la directora del instituto Isla Verde, María José Pérez, a desplazarse a Guatemala para participar en un foro de intercambio de ideas y experiencias. Aneas dice que pretende seguir con el desarrollo de los proyectos, pero avanzando un paso más. "Queremos continuar con lo mismo. Se ha concienciado al alumno y ahora queremos que actúen".
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