Enrique Bunbury ha lanzado este martes Esperando una señal, la canción que el músico zaragozano ha compuesto para la película El universo de Oliver, dirigida por el algecireño Alexis Morante y que tendrá su preestreno en el Teatro Florida de Algeciras el 7 de mayo antes de su estreno en salas el día 13.

Alexis Morante y Enrique Bunbury se llevan trabajando juntos desde hace más de una década. El cineasta algecireño ha dirigido varios videoclips, cortometrajes y documentales con el zaragozano, que ahora pone su talento al servicio del primer largometraje de ficción del algecireño. 

En esta canción, Bunbury evoca a su admirado David Bowie y enreda su guitarra entre nebulosas eléctricas y magnetismos de otra galaxia. Grabado en Los Ángeles bajo la producción de Rafa Sardina, este nuevo trabajo viene acompañado por un videoclip que dirige Eric Boadella que nos sumerge en mundos mágicos, por los que también se deja llevar el protagonista de El universo de Oliver. Es el primer tema que lanza tras anunciar su retirada de los escenarios el pasado mes de febrero.

La canción nos invita a saltar a otra dimensión con un mensaje esperanzador y optimista. “No puedes soportar tanta realidad / Tendrás que crearte un mundo hacia lo desconocido… El universo tiene un plan mucho mejor / Que el que pueda imaginar”, dice la letra.

El universo de Oliver llegará a las salas de cine de toda España el próximo 13 de mayo, aunque antes, el 7 de mayo el Teatro Florida de Algeciras acogerá el preestreno mundial del largometraje. La cinta cuenta con un reparto encabezado por María León, Pedro Casablanc, Salva Reina y Rubén Fulgencio, el joven protagonista de esta historia.

La película viaja hasta el año 1985. Óliver, un niño con una imaginación desbordante, se muda con su familia al rincón más al sur de Europa, justo cuando está a punto de pasar el Cometa Halley.

Estos acontecimientos marcarán un antes y un después en la vida emocional de Óliver, que buscará en las estrellas la solución a sus problemas en el nuevo colegio, en el barrio y en casa. Para colmo, su abuelo, apodado “el majara” se anima a ayudarle a interpretar el mensaje del cometa y dar un paso al frente en su nuevo universo.