Los dos aspirantes a presidir la Audiencia Provincial ven necesaria la segunda sección en Algeciras

Los dos aspirantes a presidir la Audiencia Provincial de Cádiz, Manuel Estrella y Nuria Orellana, consideran necesaria la creación de una segunda sección en Algeciras para rebajar la pendencia de asuntos penales, según dijeron este martes durante una comparecencia ante la Comisión de Calificación para exponer sus currículums y sus proyectos como candidatos. Ambos dispusieron para ello de 10 minutos a través de una intervención online que se pudo seguir en la web del Consejo General del Poder Judicial.

El Ministerio de Justicia prevía crear en 2024 una segunda sección de la Audiencia para poder hacer frente a las macrocausas vinculadas al narcotráfico, con decenas de acusados cada una de ellas, en atención a las demandas insistentes del conjunto de los operadores jurídicos del Campo de Gibraltar. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) se hizo eco de la iniciativa y presentó al ministerio la propuesta de refuerzo, que ya cuenta con el informe favorable del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Sin embargo, en octubre, el Gobierno congeló la creación de nuevos juzgados en 2025 por la falta de presupuesto para afrontar una avalancha de demandas de jueces y magistrados que reclaman el pago retroactivo de su productividad tras una sentencia del TSJ de Madrid.

Manuel Estrella es el actual presidente del órgano judicial gaditano y también presidente del tribunal de la Sección Primera. Nuria Orellana es magistrada de la Sección Quinta y especialista en Mercantil. La jerezana fue la primera en explicar su plan de actuación, Tras informar de su amplia trayectoria profesional y de los distintos méritos logrados en su carrera, abordó temas de interés para la Justicia en la provincia, como la puesta en marcha de la Ciudad de la Justicia en Cádiz y en Jerez para paliar las carencias en materia de infraestructuras, la necesidad de crear una segunda sección en Algeciras para rebajar la pendencia de asuntos penales o el reto que supone la creación de los tribunales de instancia y la nueva oficina judicial a partir de la entrada en vigor de la Ley Orgánica 1/2025.

Orellana también subrayó la importancia de celebrar plenillos para unificar criterios entre los magistrados, el impulso de las nuevas tecnologías en la implantación del expediente judicial y los señalamientos telemáticos, así como la colaboración institucional con otros órganos judiciales, institucionales y colegiales.

"Soy trabajadora, responsable y estudiosa", afirmó la magistrada para "solicitar la confianza" de la Comisión de Calificación y colocarse al frente la Audiencia de Cádiz. En caso de ser elegida, sería la primera mujer en presidirla.

Estrella

Transcurridos los 10 minutos asignados a Nuria Orellana, tomó la palabara Manuel Estrella, presidente de la Audiencia de Cádiz desde enero de 2011. Al igual que hiciera su compañera (aunque de forma más breve), realizó un repaso de su trayectoria y logros profesionales, poniendo especial énfasis en su labor como consultor internacional.

Estrella insistió en la complejidad que entraña la Audiencia de Cádiz, habida cuenta la dispersión de sus cuatro sedes (Cádiz, Jerez, Algeciras y Ceuta) y mencionó también la amplia labor inspectora que ha llevado a cabo "en todos los juzgados de todos los partidos judiciales de la provincia", lo que le hace conocedor de la situación, las deficiencias y las susceptibles mejoras que registran cada uno de ellos.

El también presidente de la Sección Primera recalcó su participación en comisiones judiciales de gran calado, por cuanto se acordaron en ellas la destrucción de importantes cantidades de droga, así como de vehículos decomisados en operaciones antidroga, cuya cantidad, dijo, es "desesperante", un calificativo que repitió para hablar del número de cadáveres que deben ser exhumados en el Instituto de Medicina Legal (IML).

Asimismo, el magistrado señaló varias sentencias dictadas en la Audiencia de Cádiz que han marcado el 'camino' para resoluciones judiciales posteriores. Se refirió así al caso de los 'bebés robados' y a las demoliciones de edificaciones ilegales que deben ser ejecutadas en la condenas por delitos contra ordenación del territorio, unas parcelaciones irregulares en las que "la provincia, desgraciadamente, bate récord".

Manuel Estrella tuvo palabras de agradecimiento para los 32 magistrados que trabajan en la provincia de Cádiz, "porque gracias a su labor se ha reducido la pendencia". Al igual que Orellana, propuso una segunda sección para Algeciras -con cinco magistrados especializados en Penal- ante la "angustiosa" sobrecarga de asuntos que soporta la Audiencia con sede en la comarca del Campo de Gibraltar.

Trató igualmente la Ley Orgánica 1/2025 y la puesta en funcionamiento de la nueva oficina judicial, ya implantada en Ceuta, razón por la cual Estrella dijo conocer "sus virtudes y sus defectos". Planteó, además, la problemática de la "sobredotación" de las plantillas de la jurisdicción Civil frente a la falta de personal en la jurisdicción Penal.

"Aquí se hace mucho y muy bien, y es importante darlo a conocer da la ciudadanía, difundir nuestra labor", concluyó su intervención el magistrado.

Manuel Estrella es el actual presidente en funciones y, en principio, parece que le daría igual seguir al frente en el Palacio de Justicia de la Cuesta de las Calesas o trasladarse al Prado de San Sebastián, en Sevilla. Estrella ha tirado varios anzuelos: además de optar a la reelección en Cádiz y a presidir la Audiencia de Sevilla, también se presentó a la presidencia de la Audiencia Nacional (no fue elegido) y desde diciembre está pendiente de saber si ‘arrebata’ el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía a Lorenzo del Río.

La presidencia de la Audiencia Provincial de Cádiz debería haber sido renovada hace bastante tiempo, pero el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha estado casi seis años bloqueado y, por tanto, inhabilitado para renovar sus órganos, por el 'secuestro' al que se vio sometido por el Partido Popular. Esa parálisis ya concluyó y se espera que este verano hay por fin un presidente o presidenta firme.