Vecinos de la Inmaculada piden más control para acabar con los botellones
Denuncian que no pueden dormir y lamentan la suciedad que acumula la zona de bebida y comida de los jóvenes
Los vecinos de la plaza Inmaculada y de la avenida Virgen de Europa reclaman que la Policía Local acabe con los botellones y con el escándalo que provocan. Los fines de semana el descanso resulta casi imposible entre los afectados. Ayer sábado cuando los vecinos salieron de sus casas se encontraron restos de botellas, vasos, latas, comida tirada por el suelo y gaviotas comiéndose los restos de patatas asadas y pizzas. "Hasta las cinco de la mañana no pudimos dormir. La semana pasada también ocurrió, llamamos a la Policía Local y no hicieron nada porque los jóvenes pueden estar reunidos en la calle. Lo que pasa es que cuando ven llegar la patrulla esconden de inmediato las botellas", denunciaron.
Los vecinos de la Inmaculada reconocen que este problema es de siempre pero no pierden la esperanza de que algún día se acabe con él. "La gente viene a beber y también a comer. Entendemos que hay locales que tienen derecho a vender comida pero los jóvenes lo tiran todo al suelo y por las mañanas la zona está de vergüenza", comentaron.
La persona contratada por la comunidad de vecinos limpió a primera hora los soportales pero la plaza permaneció como la dejaron los jóvenes. "El ruido no deja dormir a nadie. Si los policías locales vienen y ven el aspecto que tiene la zona deberían multar a los que están allí por beber o por dejar tanta porquería en el suelo", instó un vecino indignado.
Asimismo, los afectados llamaron la atención sobre los actos vandálicos que sufren los vehículos. "Esta mañana había un coche nuevo con la luna rota pero los daños en los espejos retrovisores de los coches aparcados entre la gasolinera y el instituto se ha convertido en una norma", subrayaron los vecinos que reclamaron más control policial.
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