Nuevo paso adelante para la regularización de la situación de las viviendas de La Capelina. El consejo de la Gerencia Municipal de Urbanismo dio ayer su aprobación definitiva al estudio de detalle y al proyecto de delimitación de la unidad de ejecución 4-UE-2 La Bajadilla II, lo que supone un trámite importante para el proceso de legalización de las viviendas, por el que se pretende que los residentes puedan acceder a la propiedad del suelo y regularizar su situación en el Registro de la Propiedad.

La demanda de una solución a las casas de La Capelina, en La Bajadilla, tiene ya más de dos décadas. En esa zona se edificaron una serie de viviendas ocupando suelo privado o municipal y los vecinos no han podido regularizar su situación. La barriada también carece de una urbanización adecuada.

Según destacó ayer el teniente de alcalde delegado de Urbanismo, Diego González de la Torre, el tema "estuvo abandonado durante más de 20 años y este equipo de gobierno se propuso desde un principio darle una solución, otorgarle una ordenación urbanística a la zona y legalizar las viviendas".

Para ello se alcanzó en primer lugar un acuerdo con la empresa propietaria del terreno, que se mostró dispuesta a ofertar un precio asequible para su venta a los vecinos. Para ello se hizo un estudio de parcelación de la zona para determinar cuánto ocupa cada casa a través de planos, fotografías y mediante visitas. También se hizo un análisis de los trabajos necesarios para urbanizar la zona y dotarla de los servicios necesarios, como el saneamiento, alumbrado o acerados, teniendo en cuenta los espacios libres existentes. El coste de esa urbanización también será repercutido a los vecinos

"El proceso no ha sido sencillo, ha estado lleno de escollos y ha habido que conjugar los intereses del Ayuntamiento, de la empresa propietaria de suelo y de los propios vecinos, hasta llegar a la fase actual", manifestó el delegado de Urbanismo. Según explicó, el estudio de detalle y la parcelación deberán pasar ahora por pleno, y después habrá que firmar un convenio entre el Ayuntamiento y la empresa Suralagro -propietaria del suelo- y fijar el precio de venta de las parcelas en el que se repercutirá el importe del proyecto de urbanización. Ese será el último paso para que los vecinos de La Capelina puedan acceder al fin a la propiedad de sus viviendas.