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Recesión económica: ¿en qué consiste y en qué se diferencia de una crisis?

Recesión económica: ¿en qué consiste y en qué se diferencia de una crisis?

Recesión económica: ¿en qué consiste y en qué se diferencia de una crisis?

La recesión es un concepto muy estudiado en el mundo de la economía y lo cierto es que este término tiene un gran significado en lo que a situación económica de un país se refiere. ¿Pero qué es exactamente? ¿Cómo se diferencia de una crisis económica?

¿Qué es la recesión económica?

La economía de un país puede atravesar diferentes ciclos, tales como la recesión, la recuperación o la expansión. En este caso, la recesión se trata de la variación negativa del Producto Interior Bruto (PIB) durante dos trimestres consecutivos. Este proceso provoca la disminución del ritmo de la economía. 

Normalmente, la recesión viene provocada por la variación del índice de inflación. De hecho, el economista Keynes asegura que una recesión se origina con la restricción de la liquidez (circulación del dinero). Esta restricción provoca, por tanto, que el poder adquisitivo de las personas se vea restringido, así como la estabilidad económica de los mismos.

En otras palabras, se puede decir que la recesión económica es la disminución o reducción de la actividad económica en el conjunto de la economía. En Economipedia se puede estudiar más en profundidad este concepto.

Causas de una recesión económica

Una recesión económica puede ser provocada por multitud de causas diferentes, aunque es cierto que hay algunas que son más comunes. Por ejemplo, las crisis a nivel mundial, una situación prolongada de desaceleración económica, crisis sanitarias o pandemias.

Esta última es la causa que está provocando una recesión económica en la actualidad, especialmente en España. La Covid-19 hizo que se decretara un Estado de Alarma, de modo que la economía del país se ha visto gravemente afectada.

El hecho de haber paralizado a un país casi por completo provocó que muchas personas perdieran su empleo o vieran mermados sus ingresos, del mismo modo que muchas empresas dejaron de obtener beneficios e, incluso, algunas se vieron obligadas a cerrar. Todo ello, unido a las dificultades que está atravesando también el sector turístico, causa que la liquidez se vea restringida. De este modo, los ciudadanos ya no tienen tanto poder adquisitivo, tal y como se ha comentado anteriormente. Esto provoca que no se tenga la misma estabilidad económica y, por tanto, no se consuma tanto, por lo que el flujo de dinero es menor.

Este es el ejemplo más claro y, sobre todo, actual, de recesión económica.

¿Cuáles son las consecuencias de una recesión económica?

Las principales consecuencias de una recesión económica son claras y en esta situación de pandemia mundial pueden identificarse fácilmente: desciende la inversión, aumenta el desempleo y descienden los salarios.

Igualmente, el consumo se ve reducido de manera considerable y, por tanto, se acentúa todavía más el descenso de ingresos que sufren los negocios. Esto vuelve a afectar, irremediablemente, a la pérdida de puestos de trabajo y al cierre final de los negocios. 

¿Es posible recuperarse rápidamente de estas consecuencias?

La respuesta es tan dura como sencilla: no. A pesar de que el PIB crezca y se viva un periodo de reactivación económica, las consecuencias de una recesión económica no desaparecen de la noche a la mañana. De hecho, es necesario que el crecimiento sea superior a un determinado porcentaje para poder empezar a crear empleo, por lo que no todas las reactivaciones económicas son inmediatamente positivas.

El consumo tampoco se reactiva de manera inmediata: será necesario crear empleo para que las personas vuelvan a tener ingresos y, con ellos, una estabilidad económica con la que se animen a consumir y reactivar, poco a poco, la economía del país.

A pesar de todo ello, cuando llega la recuperación económica es cuestión de tiempo que se traslade al resto de actividades del país y se mejore, por tanto, las condiciones de vida de los ciudadanos.

Recesión vs. crisis: ¿cuáles son las diferencias?

Una crisis económica se puede definir como el periodo en el que la economía del país afronta dificultades durante un tiempo prolongado. Así, se trata del ciclo económico en el que la economía experimenta un decrecimiento considerable. Dicho de otro modo, es el punto intermedio entre una recesión y una depresión económica.

Por lo tanto, una crisis económica provoca una inestabilidad económica con grandes consecuencias durante un tiempo más extenso que la recesión. Además, la crisis afecta también a la estabilidad financiera, tanto en las inversiones como en los mercados financieros. Y, del mismo modo que la recesión, acaba teniendo consecuencias en el poder adquisitivo de las familias, provocando que el avance de la economía se suma en una depresión.

En definitiva, una crisis económica es mucho más duradera que una recesión y provoca, pues, consecuencias más graves en la estabilidad financiera. De este modo, el país que sufra una crisis tardará más tiempo todavía en conseguir la recuperación económica. Actualmente, estamos viviendo una recesión económica que podría provocar una crisis, similar a la vivida en el pasado año 2008.