Emilio Herrera se despide del Casino y lamenta la falta de apoyo municipal
Ramírez y Roballo presentan sus candidaturas para sustituirle en la presidencia
Emilio Herrera se despide el próximo mes de la presidencia del Casino con la sensación de que la entidad ha carecido durante sus tres años de mandato del apoyo del Ayuntamiento. Considera que ha cumplido con su función, que deja el Casino con las cuentas saneadas y que, tras "algunos disgustos", ha llegado el momento de dejar que otro socio coja las riendas de la entidad. Herrera no optará a la reelección y, hasta el momento, se han presentado dos candidaturas para sustituirle encabezadas por Adolfo Ramírez y Antonio Roballo. El plazo de inscripción de los candidatos finaliza el 30 de noviembre y las elecciones tendrán lugar el próximo 15 de diciembre.
Herrera afirmó ayer a este diario que se marcha satisfecho por el trabajo que ha realizado su junta directiva. El presidente subrayó que el Casino ha organizado más de un centenar de actos culturales durante los tres últimos años y que ha colaborado con diversos colectivos de la ciudad y la comarca. Una labor que, dijo, no se ha visto respaldada por el Consistorio, lamentando que ni la concejal de Cultura, Inmaculada Nieto; ni el alcalde, Tomás Herrera, se han dignado a reunirse con su junta directiva para establecer líneas de colaboración.
Durante este mandato, la entidad ha realizado la obra de rehabilitación de la fachada del edificio, ha cambiado las puertas de la entrada principal y ha instalado un ascensor nuevo. Herrera cree que, de esta forma, se ha demostrado que el Casino se puede gestionar y mantener gracias a las cuotas que abonan los alrededor de 600 socios. El presidente recordó que llegó al cargo a propuesta de un grupo de socios, que se oponía a la ambiciosa reforma integral del Casino que planeaba la anterior junta directiva. Una actuación que estaba previsto se financiara mediante el alquiler de parte de la planta baja del edificio.
Herrera recalcó que su junta directiva ha realizado un "magnífico" trabajo. Una trayectoria que, en su opinión, no debe verse emborronada por un incidente reciente con una de sus miembros. A preguntas de este diario, el presidente reconoció que han existido discrepancias con Juana Mari Moreno después de que ésta y la orquesta con la que cantaba hayan dejado de actuar los viernes en el Casino. Según Herrera, cuando le preguntó a su compañera de junta sobre la organización de las actuaciones para Navidad, ésta le informó de que no podrían contar con ella -"que cantaba gratis"- y la orquesta ya que habían firmado un contrato con un establecimiento hotelero. El presidente se sintió decepcionado y, desde entonces, Moreno no ejerce las funciones. Herrera recalcó, no obstante, que no ha sido destituida oficialmente ya que las elecciones para la nueva junta están a la vuelta de la esquina.
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