Curiosidades sobre los alcaldes

Hoy sábado 11 de junio, Algeciras conocerá en la persona de José Ignacio Landaluce Calleja a un nuevo alcalde. Será el séptimo en la historia democrática de la ciudad tras la transición y el primer regidor bajo las siglas del PP.

No pocas anécdotas y vicisitudes distintas ha vivido la población junto a sus alcaldes, a lo largo de los 256 años que la ciudad goza de poseer ayuntamiento propio.

La primera circunstancia, nace con el primer alcalde. En 1755, la ciudad queda autorizada para tener ayuntamiento propio. Siendo designado como primer alcalde del mismo Felipe Antonio Badillo; el cual no puede hacerse cargo de la primera corporación, por razones desconocidas; siendo sustituido por el juez Félix Guillén.

En 1812, el alcalde Manuel Miciano tuvo el honor de jurar la Constitución proclamada en Cádiz (La Pepa); siendo dos años después destituido por el alcalde fernandista Pedro Barte Ortega.

El primer alcalde que cobra del erario público fue José Bárbara Mato (1848), el cual además ejerció como corregidor. El ayuntamiento no pudo con la carga económica que esto suponía, y fue sustituido tres años más tarde.

El hecho más sangriento relacionado con la primera autoridad municipal de la ciudad de Algeciras ocurrió en 1868, cuando Gaspar Segura, alcalde de Algeciras y miembro de la Junta Represora del Contrabando, fue abordado en la playa de La Marina (en el momento en el que se disponía a huir a Gibraltar), siendo apuñalado por varios individuos, cayendo muerto en los brazos de su esposa que lo acompañaba.

En 1897, José Sagrario Fernández dimite voluntariamente, ante lo que considera atropello por parte del Gobernador Militar, al suprimir éste el tradicional festejo taurino llamado toro enmaromao.

El 1 de enero de 1906 fue nombrado el alcalde que menos tiempo ha estado al frente del ayuntamiento de la ciudad, siendo éste Juan González Olmedo; el cual y tras ser nombrado, apenas segundos después fue destituido, ante la lectura de una Real Orden por la que se nombraba (por razón de estado y en cumplimiento de la ley vigente), a Emilio Santacana y Mensayas. Tras la decisión estaba la preparación de la Conferencia Internacional, que comenzaría a desarrollarse días más tarde.

En 1931, Diego López Tizón, sería el primer y verdadero alcalde elegido democráticamente.

En definitiva, estamos ante la elección de un cargo de gran importancia para la ciudad y sus habitantes; y al que desde aquí, le deseamos el mayor acierto en su gestión, porque al fin y al cabo, su suerte en el ejercicio de su función será la suerte de todos los vecinos de Algeciras.