Contenido patrocinado

Cuidando a nuestros hijos. Espiar no es lo mismo que acompañar

  • ¿Podemos espiar a nuestros hijos?, ¿es legal? Hay que tener claro que todo padre o tutor legal tienen el derecho de cuidar de la mejor manera a sus hijos, aunque ello suponga traspasar su intimidad

Cuidando a nuestros hijos. Espiar no es lo mismo que acompañar.

Cuidando a nuestros hijos. Espiar no es lo mismo que acompañar.

Hace unas décadas atrás lo más importante para un adolescente tal vez era vestirse bien y tener los mejores tenis, pero en esta época es tener el móvil a la mano. Gracias al móvil pueden sentirse seguros e integrados a la sociedad y en lo que ellos consideran es parte de la vida.

A sus cortas edades no cuentan con la madurez y responsabilidad emocional para tomar las mejores decisiones de cómo actuar tanto en la vida real como virtual. Es por esto que los padres deben estar constantemente revisando y controlando lo que hacen sus hijos en internet.

Es aquí donde nos encontramos con un gran dilema, ¿podemos espiar a nuestros hijos?, ¿es legal?, ¿está bien? Antes de tener una respuesta, debemos tener en claro que todo padre o tutor legal tienen el derecho de cuidar de la mejor manera a sus hijos, aunque esto incluya traspasar su intimidad.

¿Por qué es importante revisar lo que hacen nuestros hijos?

Recordemos el caso del agresor sexual adulto que acosó a una menor de 13 años, contactándose con ella por Facebook, enviándole contenido inapropiado y proponiéndole tener relaciones sexuales. Este hecho fue descubierto por la hermana de la menor quien al verla viendo las fotos del agresor desnudo dio aviso a su madre, quien al corroborarlo procedió a denunciar el acto.

Fue sentenciado a 3 años de cárcel y a pagar una multa de 8.000 euros por cometer exhibicionismo ante otras menores también. Este contraatacó bajo el argumento que las fotos obtenidas para su sentencia fueron obtenidas de forma ilegal al violar el derecho a la intimidad de la víctima.

Entonces, ¿la madre cometió algún delito?

Los padres al ser responsables de la integridad del menor, van a tomar las medidas necesarias para evitar que alguien afecte su integridad. Por ejemplo, si sabemos que transitar por un determinado lugar o calle es peligroso y más aún si el menor va solo, entonces los padres se lo prohibirán o tratarán siempre de que alguien mayor los acompañe. Con el internet debería ser lo mismo y por eso es comprensible la reacción de la madre en el caso que acabamos de ver.

Por otro lado, hay que tomar en cuenta que toda la información que compartimos en la red, deja de ser privada al momento de exponerla a los demás, por lo tanto, no podemos hablar de una violación a la intimidad cuando todos los demás lo pueden ver.

No debemos confundir monitoreo o control con intromisión. Por eso no se debe cruzar la línea y andar inmiscuyéndose en todo lo que hacen nuestros hijos, eso sólo crearía un ambiente hostil, lejos de la confianza que se busca generar.

¿Las leyes apoyan el espionaje a menores?

Para empezar, podríamos llamarlo control o acompañamiento. Y sí, las leyes españolas avalan esta acción siempre que se tengan indicios de que el menor esté en peligro. La Sala Penal señala que se debe respetar la intimidad del menor, pero este también tiene el deber de brindar las claves de su perfil a sus padres o tutores legales para que revisen sus conversaciones.

Los padres influyen en las actividades positivas y negativas que haga el menor tanto en su vida diaria como en la red, por eso tienen todo el derecho de salvaguardar la seguridad de sus hijos frente a terceras personas.

Teniendo tantas herramientas de comunicación deberíamos reforzar más la comunicación y valores familiares y así evitar que otras personas quieran denigrar o atentar contra cualquier menor.