Cruz Roja reparte alimentos a unos 20 sin hogar por las noches en Algeciras

Las noches de Algeciras ya no son tan solitarias ni tan frías. Al menos eso puede rondar por las cabezas de algunas de las personas sin hogar que, casi sin querer, forman parte del día a día de los algecireños ya que están ahí, durmiendo en cajeros, bajo puentes o resguardados en parques. Cruz Roja, las noches de los lunes, miércoles y viernes, atiende a una media de veinte personas sin hogar desde hace dos semanas en la ciudad. Les lleva alimentos y bebidas calientes.

Se trata de un proyecto de Atención Integral a Personas Sin Hogar, destinado a ofrecer asistencia a uno de los colectivos más vulnerables, que ya existe de hecho en Cádiz y Jerez. El voluntariado de la institución humanitaria ya ha comenzado esta iniciativa. En concreto son una veintena, integrados en las Unidades de Emergencia Social (UES), que recorren la ciudad para repartir alimentos y bebidas calientes a las personas sin hogar en la calle. Suelen salir sobre las nueve y media de la noche y van rotando en grupos de unos tres o cuatro voluntarios cada día.

Semanalmente atienden a una media de 20 personas, aunque no todos repiten cada jornada, ya que hay personas que viven en la calle, pero están solo una temporada pequeña en Algeciras. De modo que por ahora Cruz Roja no posee una estimación exacta de cuántas personas viven a la intemperie en la ciudad.

En cuanto a los atendidos, hay desde personas con 18 años, en su mayoría de origen marroquí, hasta ciudadanos que alcanzan los 60, aunque la media de edad Cruz Roja la circunscribe en torno a los 40 ó 50 años. Y el mayor número de ellos son inmigrantes, pocos españoles, tendencia muy distinta por ejemplo a lo que se vive en Cádiz, donde la mayoría son ciudadanos nacionales. En este caso, entre los voluntarios que les atienden hay personas que se defienden con las lenguas maternas de los sin hogar.

Las UES recorren toda la ciudad. Hace tres semanas que arrancó el proyecto, aunque la primera semana fue más de prueba, yendo de la mano de las asociaciones que trabajan en la ciudad con los sin hogar, para conocer exactamente cuáles son los puntos de mayor necesidad y dónde suelen encontrarse, aunque se trata de personas que suelen estar en continuo movimiento y no necesariamente en el mismo sitio.

La columna vertebral de esta actividad la forman precisamentes las Unidades de Emergencia Social, que se encargan de acudir a los puntos donde se encuentran estas personas para realizar este reparto, en el que además de los alimentos se ofrece atención psico social, asesoramiento sobre recursos a los que pueden acudir y sobre todo mucha escucha a personas que viven en una situación de exclusión social y residencial extrema. El proyecto está financiado por Cruz Roja Española y con fondos procedentes de la recaudación del IRPF destinada a otros fines de interés social.

Las UES de Cruz Roja Española ya prestan esta atención social en Cádiz y Jerez, con financiación de los ayuntamientos de ambas localidades, donde el pasado año se dio asistencia a 590 personas. A esto se suma los centros de día para personas sin hogar con los que cuenta las Asambleas Locales de Tarifa y de Jerez. Un 85% de las personas atendidas son hombres, si bien se está constatando un aumento de la presencia femenina.

El perfil de las personas abocadas a vivir en la calle ha cambiado con respecto a años anteriores, según constata Cruz Roja Española en las ciudades donde el proyecto ya está en marcha. Además de atender a personas con problemas de toxicomanías y patologías psiquiátricas, se ofrece asistencia a sin hogar que, como consecuencia de la crisis socieconómica, han perdido el empleo y han empezado a sufrir situaciones de exclusión social. La institución actúa como puente hacia otros recursos orientados a la inclusión social y a través del trabajo en red y alianzas con distintas organizaciones de la sociedad civil, como la Red Europea de Lucha contra la Pobreza (EAPN), y las asociaciones y colectivos que trabajan con las personas sin hogar en Algeciras. Del mismo modo busca el apoyo y la complicidad social de ciudadanos, empresas y entidades con la búsqueda de soluciones ante una de las caras más duras y dramáticas de la vulnerabilidad social.