Construcción de casetas para pesquerías (1934-1935)
Historia del Puerto de Algeciras (LVI)
Historia. La ampliación y defensa de terrenos en el Chorruelo y su habilitación para reparación de artes de pesca se terminaron a mediados de junio de 1935
La actividad pesquera había sido, tradicionalmente, una de las más relevantes de las desarrolladas en el incipiente puerto de Algeciras desde la refundación de la ciudad a principios del siglo XVIII, aunque hasta mediados del siglo XIX fuera empleada tan sólo como un medio de subsistencia de la población y de su entorno. Pero sería con la construcción del muelle de la Galera en 1913 y el establecimiento del Protectorado Español en Marruecos, pero, sobre todo, cuando a partir de 1920 comenzaron a instalarse empresas de pesca del norte de España en ciudades del sur atraídas por la riqueza de los caladeros marroquí y canario-sahariano, cuando la pesca en el puerto de Algeciras asista a un largo período de desarrollo que se prolongará hasta la década de los sesenta del siglo XX.
Al mismo tiempo que se multiplicaba el número y la calidad de las embarcaciones de pesca con base en el puerto de Algeciras y se incrementaban la toneladas de capturas desembarcadas con destino, la mayor parre de ellas, a la exportación, las necesidades de espacios portuarios dedicados a la preparación, conservación y exportación del pescado (zonas de venta, selección, envasado, aporte de hielo, etc...) y de superficies destinadas a contener útiles de pesca, cajas y redes, exigían la habilitación de zonas del muelle y construcción de depósitos y almacenes para ser usados exclusivamente por los pescadores.
Desde la creación de la Junta de Obras del Puerto, serían frecuentes las quejas de los pescadores y de las empresas que se dedicaban a la preparación y exportación de las capturas a la Junta exigiendo la habilitación de unas superficies donde ellos pudieran realizar sus labores sin los inconvenientes producidos por la presencia de pasajeros en tránsito y el almacenamiento de mercancías que ocupaban zonas del muelle que, habitualmente, ellos utilizaban.
El 28 de marzo de 1931, la Sociedad Hijos de J. Barreras presentó a la Junta una instancia para que ésta solicitara al Gobierno autorización para poder instalar en el muelle de la Galera un depósito comercial dedicado a carbón inglés y a otros efectos con destino a las flotas pesqueras que tuvieran el puerto de Algeciras como base de operaciones. La Junta le exigió que presentara el correspondiente proyecto, lo que hizo la Compañía viguesa en el mes de diciembre, respondiendo la Comisión negativamente al considerar que los documentos aportados eran insuficientes para poder tomar una decisión favorable, además de no encontrar adecuado el lugar donde se proponía situar el citado depósito. Es probable que en la decisión del Junta primara la intención de construir ella misma almacenes y depósitos públicos para arrendarlos a los industriales de la pesca, como en breve sucedería.
Los testimonios recogidos por la documentación de la época permiten asegurar que entre 1917 y 1932 se edificaron y habilitaron diversas construcciones, la mayor parte de ellas almacenes y casetas de madera, destinadas a actividades relacionadas con la pesca que respondían a la demanda de pescadores y exportadores, pero que no reunían las condiciones de calidad ni disponían de los medios técnicos adecuados para el desarrollo de las funciones a las que se dedicaban.
Las quejas y demandas de los pescadores y de los exportadores condujeron, en el año 1933, a que la Junta ordenara la redacción de un proyecto para la construcción de dos casetas para pesquerías en el lado norte del muelle de la Galera. Este proyecto, a la espera de la construcción del muelle pesquero, cuyo diseño se estaba preparando por la Dirección Facultativa de la Junta para su presentación a la Superioridad, tenía por objeto habilitar una zona exclusiva de atraque para las traíñas, faluchos y otras embarcaciones que se dedicaban a la pesca, así como la construcción de dos casetas para las labores de almacenamiento de sal, oficinas, fábrica de hielo, salas de preparación, etc…, con vistas al desembarco, selección y exportación del producto. En la sesión cebrada el día 22 de diciembre de 1933 se dio cuenta de haberse aprobado por el Gobierno el proyecto de pesquería en el lado norte del muelle de la Galera, disponiéndose que se ejecutase con cargo a la subvención concedida por el Estado para el ejercicio de 1933 y acordándose que las obras se emprendieran de inmediato.
Las dos caseta, de planta rectangular, erigidas a dos metros del cantil del muelle, tendrían unas dimensiones de 10 metros de longitud por 7,40 metros de anchura. Las paredes serían de hormigón y las cubiertas de chapa acanalada de Uralita sobre cerchas de madera. El presupuesto de ejecución ascendía a 49.991,37 pesetas. Pero las necesidades generadas por la actividad pesquera crecían al mismo ritmo que se incrementaba la cantidad de pesca descargada y los trabajos de preparación y de exportación de la misma. En el verano de 1933 se aprobó el Proyecto de ampliación y defensa de terrenos ganados al mar en el Chorruelo, que posibilitaría ampliar el espacio litoral situado al sur de la desembocadura del río de la Miel varios metros, sobre cuya superficie se proponía situar la zona de reparación de artes de pesca.
La ampliación y defensa de terrenos ganados al mar en el Chorruelo y su habilitación para reparación de artes de pesca, estuvieron terminadas a mediados de junio de 1935. Las obras de la primera de las casetas para pesquerías del lado norte del muelle de la Galera se prolongaron a lo largo de los ocho primeros meses del año 1934, estando totalmente finalizadas a mediados de agosto, cuando se acordó su recepción con la asistencia del Ingeniero Jefe de la provincia.
Al tiempo que se terminaban las obras de la caseta de pesquería, se habían construidos tres locales adosados a la citada caseta en su lado Este, dos de ellos para ser utilizado como depósitos de sal y el otro, de mayor tamaño, para almacén de hielo. El 18 de octubre de 1934 se dio cuenta a la Comisión de las propuestas de la empresa que ya regentaba una fábrica de hielo en el puerto y de la que dirigía don José Ros Pineda, solicitando que le fuera arrendado uno de estos locales para depósito de hielo.
En la misma reunión fue presentado por el Ingeniero Director el proyecto para la construcción de la segunda caseta de pesquerías en el lado norte del muelle de la Galera que, una vez analizado, fue informado favorablemente por la Comisión. Las obras se iniciaron en el mes de noviembre de 1934, estando finalizadas el 9 de marzo de 1935, cuando está fechada el acta de recepción.
Antonio Torremocha. Doctor en Historia Medieval. Académico de número de la Academia Andaluza. Director del Museo de Algeciras (1995-2007)
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