El Ayuntamiento de Algeciras tiene preparado un proyecto de preservación de los restos de los hornos romanos de El Rinconcillo, declarados Bien de Interés Cultural (BIC). El yacimiento se vio afectado en 2002 por la construcción de un muro de contención en la parcela en la que están enterrados los vestigios y la actuación municipal tiene como fin salvar este importante patrimonio algecireño, que corre riesgos en la situación actual del terreno.

La intervención estará recogida, según lo previsto, en el presupuesto de 2017 y la idea es llevarla a cabo a muy corto plazo. Ha de contar con la autorización de la delegación territorial de la Consejería de Cultura y estará coordinada por el museo municipal. Es un proyecto de reversión y conservación para garantizar la buena suerte de los restos. En el futuro, cuando las circunstancias lo permitan, el Consistorio quiere también realizar una recuperación y puesta en valor para añadir a Algeciras otro atractivo cultural y turístico proveniente de su historia y su pasado.

El arqueólogo municipal, Rafael Jiménez Camino, explica que en ese solar se encuentran los restos de un complejo alfarero con vestigios de al menos dos hornos, aunque se tiene conocimiento de que hubieron muchos más en las inmediaciones, los cuales formarían parte de un centro de producción industrial de la primera mitad del siglo I antes de Cristo.

En este centro se habrían fabricado los envases para guardar y transportar salazones y derivados de la pesca, en una época anterior a la fundación de la ciudad romana de Algeciras. Así, habría trabajado primero para producir ánforas para Carteia y después para la Algeciras romana.

Las ciudades contaban en los alrededores con sus polígonos industriales, que se ubicaban en lugares donde hubiese materia prima -arcillas- y también donde resultase más sencillo el transporte de la mercancía hacia el exterior, como en este caso el río Palmones y la cercanía del mar.

Los restos de los hornos romanos de El Rinconcillo se hallan en una parcela situada en el número 81 de la avenida Diputación. En su momento fue expropiada por el Ayuntamiento.

Pilar Pintor, concejala de Cultura, detalla que en 2002 se construyó en el mencionado solar un muro de contención (hay un desnivel en el terreno) sin la debida autorización. La zapata de ese muro afectó a la cámara de combustión del complejo alfarero. La edificación además, según apunta el informe arqueológico efectuado, no se hizo con los requisitos técnicos adecuados para cumplir con su función de sostener las tierras, que se están desplazando.

El proyecto de preservación consiste en la limpieza, estabilización y la cobertura con malla geotextil de la colina donde están enterrados los vestigios, restos arqueológicos de la parte del complejo alfarero en la que se depositaban las piezas defectuosas que el alfarero rechazaba y del extremo de una cámara de uno de los hornos.

A continuación se procederá a demoler el muro de contención y se construirá un nuevo lienzo medianero. También se cubrirá con tierra el espacio que quedará entre el nuevo muro y el yacimiento.

Esta actuación garantizará la integridad de los restos. En el futuro se tratará de preparar otro proyecto de recuperación de los vestigios.

Pintor recuerda que el museo municipal cuenta con la Sala Iulia Traducta, en la que encuentran elementos relacionados con la actividad alfarera de los hornos romanos de El Rinconcillo. En esa sala se conservan ánforas fabricadas en dichos hornos así como el sello característico que marca su especificidad. También en este espacio del museo se puede contemplar una maqueta que reproduce cómo se cree que eran esos hornos, con información de las partes que se conservan.

El Ayuntamiento ya ha estado actuando estos días en la parcela del yacimiento. Han sido trabajos de limpieza y desbroce para evitar que la maleza y las raíces puedan ocasionar algún daño en los restos.

El alcalde, José Ignacio Landaluce, se pasó por la zona para interesarse por estas labores. El regidor destaca que los restos arqueológicos de los hornos romanos "hablan de la historia de Algeciras" e incide en la importancia de que se lleve a cabo un buen mantenimiento del espacio que ocupan hasta que sea posible llevar a cabo la restauración.

Landaluce remarca la intención del equipo de gobierno de ir recuperando restos y yacimientos en el término municipal, como hace poco se hizo en el parque Las Acacias, "para afianzar y documentar los conocimientos que se tienen sobre la historia de la ciudad y para enriquecer con ellos su patrimonio histórico".

Las referidas labores en el solar de los hornos romanos forman parte de un proyecto global que pasó por la comisión informativa de Patrimonio, que contempla la limpieza y desbroce de varios yacimientos. El Consistorio ya ha actuado en las murallas medievales, los baños de la plaza San Bernardo, las atarazanas califales y los baños meriníes. Tras la actuación en la parcela de los hornos solo queda la zona de las piletas de salazón romanas de la calle San Nicolás. Son trabajos que efectúa la delegación de Limpieza con la supervisión del arqueólogo municipal.