Apadis proyecta un nuevo horizonte de trabajo

La Asociación de Padres de Discapacitados Intelectuales de la Bahía de Algeciras (Apadis) ha puesto en funcionamiento este verano el nuevo Servicio de Ocio. Se trata de una iniciativa más que emprende este colectivo en su esfuerzo por mejorar la calidad de vida de estas personas y sus familias. De este modo, se suma al resto de recursos que ya ofrece la entidad a quienes lo necesitan, acumulados como resultado del trabajo realizado durante más de 40 años: centros ocupacionales, residencia de adultos, viviendas tuteladas y centro de formación.

El Servicio de Ocio Apadis es un amplio proyecto compuesto por cuatro programas: ocio compartido, vacaciones, cultural y deportivo. El primero de ellos en estrenarse ha sido el programa deportivo, con 28 personas de edades comprendidas entre los 7 y 60 años, a través del Campus de Verano Multideporte que se desarrolla durante este mes en las instalaciones del Club Deportivo Hípica Botafuegos. Pero además, el programa de deporte también consta de Escuelas Deportivas de fútbol sala, baloncesto, gimnasia rítmica y senderismo, que se pondrán en marcha a partir de septiembre y hasta el mes de mayo. En este sentido, José María España, educador de Apadis, hace un llamamiento a los padres de discapacitados intelectuales para que apunten a sus hijos a estas actividades y participen todos los servicios que ofrecen. "Estamos abiertos a toda la comarca, aunque la mayoría de los usuarios son de Algeciras", dice España.

Para desarrollar el campus, han contado con la ayuda de la Junta de Andalucía, que ha suministrado el equipamiento deportivo; del Patronato Municipal de Deportes de Algeciras, que ha proporcionado los monitores, así como del Club Deportivo Hípica Botafuegos, que ha colaborado ofreciendo sus instalaciones y con una subvención, según informó el educador.

A través del Campus de Verano Multideporte, las 28 personas que participan en él desarrollan actividades lúdicas que les ayudan al mismo tiempo a mejorar sus habilidades sociales y a mantener una buena salud física.

José María España trabaja con ellos como monitor, coordinando algunas de las actividades que realizan a lo largo de la mañana. Los conduce a todos al césped para jugar al hockey. Luego los divide en dos equipos, uno verde y otro rosa. Y comienzan a jugar. Mientras los observa, el monitor comenta que ese ejercicio les sirve para trabajar la coordinación óculo-manual. "Además, la práctica deportiva les ayuda porque fomenta las relaciones interpersonales y contribuye a una buena utilización del ocio y tiempo libre", dice el monitor.

Los jugadores corren detrás de la pelota entre risas bajo las instrucciones de España, que desde fuera del terreno de juego les va indicando cómo tienen que jugar.

Cuando terminan el partido, el monitor los guía hacia a las instalaciones interiores para practicar otro ejercicio. En una amplia sala interior que hace las funciones de gimnasio, se colocan todos en círculo alrededor de un paracaídas blanco y lo sostienen con sus manos a media altura. España grita "¡arriba!", y levantan la tela tan alto como pueden haciendo que se infle de aire y quedando suspendida unos segundos, momento que el monitor aprovecha para volver a gritar: "uno, dos y tres... ¡Ya! ¡Margarita!"... Y Margarita suelta el paracaídas y sale corriendo atravesándolo por debajo hasta llegar a la parte de enfrente. Y luego "¡Javi!", y Javi hace lo mismo que su compañera... De este modo va diciendo nombres y los nombrados van pasando por debajo divertidos.

Actividades de este tipo son las que realizan los participantes del Campus de Verano Multideporte. El resto de programas comenzarán a funcionar a lo largo de los próximos meses. Dentro del plan cultural, los usuarios podrán disfrutar de ludoteca, teatro y talleres. Y el programa de ocio compartido consiste en llevar a cabo actividades cotidianas como ir al cine o salir de tapas para ayudarles a que aprendan a desenvolverse socialmente.