Algeciras

Algeciras vuelve al cine

  • La ciudad despidió su última sala hace 13 años con 'La semilla de Chuky' en Las Palomas

  • Ahora cuenta los días para recuperar una tradición que empezó con el Teatro de Variedades en 1901 y que marcó su vida social

Algeciras vuelve al   cine

Algeciras vuelve al cine

Una risotada malévola resuena en la sala mientras la gran pantalla se funde a negro. Es la risa del muñeco diabólico con la que concluye La Semilla de Chuky, una película de Don Mancini que pasó sin gloria por todas las ciudades y en Algeciras, además, con pena. Aquí, muchos la recuerdan porque dejó un último asesinato después de los créditos: el del propio cine. Con aquella carcajada, la ciudad en la que durante un siglo proliferaron las salas asistió a un episodio triste: el cierre del multicine Las Palomas, el último que quedaba. Un duro golpe para la cultura y el entretenimiento de la ciudad más grande de un área metropolitana con alrededor de 300.000 habitantes. Aquello fue el 31 de enero de 2005, ya va para 13 años. Ahora, Algeciras celebra que en unos meses volverán a proyectarse películas en pantalla grande. Será de la mano de Cinépolis, que se encuentra cerrando el acuerdo para instalarse, bajo la marca Yelmo, en el Centro Comercial Puerta Europa.

Cuando Chuky se reía, hacía unas horas que Mar adentro, de Alejandro Amenábar, había ganado 14 premios Goya. Cuentan las crónicas que en la sala en la que se proyectaba -una de las siete que había en el edificio de San Bernabé- sólo había un espectador. Por entonces el Centro Comercial Bahía Plaza era un proyecto de futuro. Estaba entonces contemplado que tuviera un multicine, pero ningún operador quiso apostar por él. Hasta ahora.

Durante estos trece años, los algecireños han hecho suyo el cine que gestiona en la actualidad Odeón en el centro comercial Bahía Plaza, en Los Barrios. Junto a los programas de Alcultura y las proyecciones veraniegas en Getares y El Rinconcillo, al margen de alguna película puntual en el nuevo Florida, han sido las únicas posibilidades de acercarse al séptimo arte en la zona.

Algeciras es una de las cuatro ciudades de España de más de cien mil habitantes que no tienen cine en su término municipal. Las otras son Móstoles y Parla, ambas en la Comunidad de Madrid, y Santa Coloma de Gramanet, en la de Cataluña. En Reus no había hasta hace un mes. Así lo refleja el 20º Censo de Salas de Cine elaborado por la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación con datos hasta el pasado 1 de abril. Las cifras muestran un cierto optimismo en el sector con un aumento del número de locales, salas y butacas que rompe de esta manera con la tendencia a la baja de los últimos años. El número de locales de exhibición en España se sitúa en 699, 24 más que hasta 2016 (+3,6%). El de pantallas también se incrementa respecto al año anterior (de 3.492 a 3.534, con 135 altas y 93 bajas), un leve crecimiento (+1,2%) que acaba con los descensos del lustro anterior. En lo que respecta al número butacas, se fija en 789.130, lo que supone un crecimiento de 10.412 (+1,3%).

La carencia de cines en Algeciras no siempre fue tal. Más bien todo lo contrario. En la memoria de la ciudad ocupan un capítulo inolvidable un puñado de locales en los que los ciudadanos más y menos mayores acumulan un sinfín de anécdotas. Tanta importancia tuvo siempre el cine en la sociedad algecireña que la única huelga que sus ciudadanos protagonizaron durante el franquismo llegó a raíz de una subida de 50 céntimos en el precio de las entradas. Fue la llamada Huelga de la Alpargata, el 25 de julio de 1962, según recordaba el periodista Pepe Vallecillo en las páginas de este periódico: "Las masas rompieron su mutismo y la ciudad vivió durante tres días en un estado de sitio no declarado".

El primer cine se instaló en Algeciras muchos años antes, en 1906, cuando el Ayuntamiento autorizó a Francisco Ramírez a poner un cinematógrafo en el Real de la Feria. Desde 1901 se proyectaban películas en el Teatro de Variedades, que en 1909 pasó ser un cine permanente. El día de la inauguración se vieron Un yerno a prueba, El presidio de Tolón, La ley del perdón y Felicidad por el año, según se lee en periódicos de la época como el África de Ceuta. El 12 de junio de 1912 un pavoroso incendio, iniciado en el proyector, lo convirtió en un montón de cenizas.

Entre 1913 y 1915, la caseta del Casino existente en el Real de la Feria fue sustituida por un edificio permanente, conocido después como Casino Cinema cuando funcionaba como cinematógrafo. Toda una leyenda en la historia de Algeciras. Según un artículo de José Ortega Díaz para el Grupo de Patrimonio del Ceper Juan Ramón Jiménez, entre los 60 y los 80 los cines eran administrados por dos empresas: la formada por Armijo, Aldana, Soto y Casero, a la que pertenecían los cines Delicias, Fuente Nueva, Sevilla, Terraza, Cinema España y Mirador, y la otra formada por Gallego y Acosta, que explotaban los cines Avenida y Alegría. A veces también se utilizaba como cine la plaza de toros de La Perseverancia. En 1945 se produjo un punto de inflexión con la inauguración del Cine Florida, hoy reconvertido en teatro y con una nueva fisonomía tras una reforma.

El Avenida, uno de los más populares, tuvo dos ubicaciones, ambas en la avenida de las Fuerzas Armadas, que entonces no se llamaba así. Estuvo un solar que quedaba entre el edificio de los militares y el edificio de la policía nacional. De hecho, la pantalla del cine era la pared de la policía. También se celebraron combates de boxeo. Después se trasladó a los bajos del Edificio Gallego, entonces en construcción. Allí hubo un bingo y un chino. Los más veteranos recuerdan el Fuentenueva y su olor a conservas de la fábrica cercana; el Alegría, al final de la misma calle, siempre lleno de mosquitos o el Cine Delicias y sus interrupciones cuando llegaba el tren de Ronda.

Donde estaba el cine Sevilla se encuentra hoy la Plaza Neda. Allí se proyectó la primera película con sonido: La mujer X. Donde años más tarde estuvo el Magallanes (1987) está la discoteca Sonora. Antes hubo un bingo. En el Terraza y el España hay supermercados. Durante 22 años funcionó el cine Almanzor, hoy un edificio de viviendas. En el Lis, construido en 1980, existe hoy en día un restaurante, La Posada de Millán. El Lis fue un referente del ocio en la ciudad durante 17 años. Abrió el 19 de marzo de 1980 con la proyección de la película El Lago Azul. Su aparición fue un impacto por sus modernas instalaciones. Fue la primera de Algeciras con proyector de platos. La empresa Gómez Reyes fue la dueña hasta el 13 de mayo de 1997, cuando cerró tras ofrecer Tesis, de Alejandro Amenábar.

En 1996 abrió el Baluarte, de escaso éxito, convertido hoy en la discoteca Kube. Y finalmente, Las Palomas, donde Chuky se rió hace trece años de una ciudad que se quedaba sin el gran entretenimiento de los dos últimos siglos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios