Los algecireños no faltaron un año más a su cita de cada 31 de octubre en el mercado Ingeniero Torroja por Tosantos. Entre puestos de fruta de la temporada, frutos secos y chucherías una riada de personas llenó los alrededores y el interior de la plaza para continuar con una tradición de más de dos siglos.

El origen de la fiesta está en el cambio de estación y en la llegada de los productos típicos del otoño. A finales del siglo XVIII, los hortelanos y comerciantes mostraban el género recién cosechado en la víspera del día de Todos los Santos y aún hoy en día se sigue haciendo. Sandía, melones y melocotones ya han dejado su protagonismo en los puestos a las naranjas, chirimoyas y granadas, que ayer se mostraban en su máximo esplendor junto a otros productos de la temporada, como las castañas o los boniatos.

En la noche de Tosantos también llama la atención la venta de cañas de azúcar o cañadú, que en otras época del año no suele verse. La sonrisa de un niño con una de estas cañas, más altas que él, es una de las estampas características de la tarde-noche del 31 de octubre en Algeciras.

La cita, cómo no, está obligada a convivir con una moda que cada año gana adeptos, sobre todo por la ilusión de los más pequeños por disfrazarse. También era la noche de Halloween y las calabazas y las figuras de brujas y fantasmas se mezclaban con la tradición. No faltaron los niños y niñas disfrazados en busca de una bolsa de chucherías para pasar la noche viendo alguna película de miedo o terror.

El centro de la ciudad comenzó a animarse desde por la tarde, cuando un pasacalles formado por los personajes de la Patrulla Canina recorrió las calles del centro hasta llegar a la plaza por la calle Tarifa. Partió desde la Plaza Alta y continuó por Joaquín Costa, General Castaños, Prim, Castelar, Teniente Miranda y Tarifa hasta desembocar en el mercado. En ese punto confluyeron dos mareas humanas y en torno a las 20:00 el tránsito comenzaba a ser dificultoso.

En los últimos tiempos se han apuntado a Tosantos algunos establecimientos de los alrededores del mercado. Llamó la atención la terraza que instaló la pescadería Martín, que desde hace unos años causa furor con sus cartuchitos de pescado. El complemento ideal para antes o después de adquirir fruta y frutos secos para pasar el resto de la noche.

También hubo animación en el mercado, donde se instaló un escenario en el que hubo actuaciones. La asociación cultural Amigos de Teatro Pepe Luis y Maru representaron algunas escenas del clásico Don Juan Tenorio, obra que llevarán al teatro Florida el miércoles 8 de noviembre.

La música corrió a cargo de David el Cordobés y María José Heredia, que interpretaron distintas piezas de la canción española desde las 21:00, momento en el que ya no cabía un alfiler más en los alrededores de la plaza. En torno a medianoche el ambiente fue decayendo.

El ambiente festivo de ayer deja paso a la jornada solemne de hoy, en la que muchos algecireños pasan por los cementerios para recordar a sus seres queridos que ya no están. En los últimos días los camposantos han tenido más actividad de lo habitual ante la cantidad de personas que ha adecentado los nichos para que hoy, día de Todos los Santos, luzcan su mejor aspecto.