Cuando Algeciras quiso un 9-N

Hoy es 9-N; hoy es el 9-N. Mucho se ha hablado desde hace tiempo de la consulta de Cataluña y no se ha mencionado que Algeciras también quiso un 9-N. Fue a finales de los noventa, en el contexto de la reivindicación de la novena provincia, de la campaña para que la comarca tuviera esta entidad administrativa propia, capitaneada por el exalcalde andalucista Patricio González.

Fue, concretamente, en 1998. El 25 de marzo de aquel año el pleno del Ayuntamiento de Algeciras aprobó solicitar al Gobierno la celebración en la ciudad de una consulta sobre la constitución del Campo de Gibraltar como novena provincia de Andalucía, una petición que salió adelante con los votos del Partido Andalucista y del Grupo Independiente.

El 24 de julio de 1998 el Consejo de Ministros consideró y rechazó la solicitud. El Ejecutivo la denegó por entender que no reunía "dos de los requisitos materiales exigidos por el artículo 71 de la Ley de Bases de Régimen Local". El primero de ellos hacía referencia a que el asunto no era de competencia propiamente municipal, al no figurar en los artículos 25, 26 y 28 de la citada ley, ni haber sido atribuido al municipio por leyes de Estado o de las comunidades autónomas.

El Consejo de Ministros zanjó: "El Ayuntamiento no tiene reconocida en la Constitución la potestad de iniciativa legislativa que conduzca a conseguir el objeto de crear una nueva provincia".

El Gobierno además argumentó que el objeto de la consulta no era de carácter local, puesto que la creación de una nueva provincia excedía de este ámbito. Adujo que el plebiscito afectaba a los otros municipios del entorno comarcal, a la Diputación de Cádiz, a la comunidad autónoma andaluza e, incluso, al propio Estado. En este apartado, el Consejo de Ministros agregó que la provincia, además de ser una entidad local de carácter básico, es también "división territorial para el cumplimiento de las actividades del Estado".

Patricio González no cejó en su empeño. Presentó recurso ante el Tribunal Supremo contra la negativa del Consejo de Ministros. "A nuestro juicio se debe partir de incluir la capacidad para decidir qué es lo importante para los intereses de los vecinos dentro del margen de la autonomía política que en la gestión de los mismos reconoce la constitución y la ley a los órganos municipales de gobierno", decía textualmente el recurso.

"Creemos que se trata de un asunto local. No se trata de pedir a los vecinos que decidan, sino consultarles respecto a si están de acuerdo con que se inicie el proceso para lograr la novena provincia para la comarca", manifestaba el andalucista.

La sala de lo Contencioso-Administrativo del Alto Tribunal ratificó el no del Gobierno a autorizar la consulta. En una sentencia de la que fue ponente el magistrado Manuel Campos, entendió que la conversión de Algeciras y el resto de la comarca en una provincia independiente trascendía "el mero carácter local" como lo demostraba el hecho de que la misma propuesta municipal incluía no sólo el territorio de Algeciras sino el de los otros términos del Campo de Gibraltar.

Para el Tribunal Supremo estaba claro que la segregación de un grupo de municipios afectaba, además, a las competencias de la Diputación Provincial de Cádiz, que "no puede ver mermada su integridad territorial sino a través de una Ley Orgánica", razonó.

Ya antes de la sentencia Patricio González hacía ver que, al margen de que el caso se perdiera, era ya un éxito que el tema se tratara en el Consejo de Ministros y llegara al Supremo, para, expuso, que se hablara del Campo de Gibraltar y su descentralización.