Carlos Trujillo, el gran capitán del CD San Roque en su época dorada, se echó ayer al equipo a la espalda para remontar con dos goles a la Olímpica Valverdeña. El bravo defensa hizo justicia y devolvió la sonrisa a los rojillos en el Manolo Mesa.

El San Roque se sobrepuso a un rival rácano, que intentó y logró trabar el juego durante muchos minutos y se puso por delante en la primera parte.

Los onubenses avisaron con un disparo de Cata en el 19' y marcaron al filo del descanso por medio de Braulio tras un córner. El San Roque estuvo frío en una primera mitad mala, constantemente interrumpida.

El equipo de David Guti volvió del intermedio más agresivo y consiguió marcar pronto. Una falta botada por Chupi encontró en Trujillo a su rematador en el minuto 52. La verticalidad de Cristian y Loren dieron otro aire a un equipo rojillo atrevido. Los sanroqueños insistieron hasta que a falta de dos minutos Romero puso un centro que remachó Carlos Trujillo para desatar la alegría.

La grada se rindió ante el alma de un jugador veterano que, tras dos años de parón, vuelve a portar los galones y también premió al debutante Maki, otro de vuelta en casa. El Sanro rompe la mala racha y vuelve a mirar arriba.