El último espectáculo del bailaor linense David Morales, El Indiano, une los ritmos de ida y vuelta y traza un puente a través del Atlántico con el montaje. Nada más procedente que, una vez visto aquí, se vea también allá. Morales lo ha conseguido. El linense representará su propuesta en Haití, en concreto en el Festival Internacional de Jazz de Puerto Príncipe, que arrancó ayer y termina el próximo miércoles.

El bailaor viajó ayer para enseñar en el Caribe un montaje mestizo "como mestizo es el flamenco". Hubo un tiempo en el que la gente se iba a hacer las Américas y regresaba rica y distinta. El flamenco también viajó a América y se alimentó con las músicas del otro lado del Atlántico. Se enriqueció con ellas, otro tipo de riqueza.

El Indiano no fusiona, sino compara, y el resultado que se obtiene presenta muchas similitudes, como la milonga de aquí y la de allí. Mucho cabe en la obra del linense, de una soleá al Volver de Carlos Gardel. Además, el espectáculo transmite un no a las fronteras.

Con su espectáculo el linense se se mueve con piano, contrabajo y batería.

El Indiano se estrenó en abril y ya se ha podido ver en el Campo de Gibraltar, en concreto en el Festival de Música de Jimena, en Algeciras y en La Línea, la última parada comarcal que ha hecho por el momento. También se ha podido ver en otros puntos de Andalucía desde que se estrenara en El Puerto, como por ejemplo en Málaga o, su cita más importante, en la Bienal de Sevilla.

"Todo parte de una idea original del investigador Gabriel de Molina, un proyecto que nace con el espíritu de homenajear a esas músicas que viajaron de un lugar a otro cambiándose y volviéndose distintas en cada trayecto", ha apuntado Morales, que ha contado para el montaje con la colaboración del cantautor Javier Ruibal, de los coreógrafos Javier Latorre y Úrsula López, y de la bailaora Rosario Toledo.

La cantaora Rocío Bazán también interviene en un espectáculo que cuenta con las guitarras de Paco Javier Jimeno y Óscar Lagos, el contrabajo de Manuel Calleja, el piano de Alberto Miras, la percusión de Javi Ruibal y el cante de José El Ecijano, Jesús Corbacho y la mencionada Bazán.

El montaje ha recibido excelentes críticas en los meses de recorrido que lleva en España.