La Real Balompédica Linense está sondeando el mercado para reforzar a su equipo en dos posiciones, la del lateral derecho y la del delantero centro. Los tres primeros partidos de pretemporada han alertado al cuerpo técnico y la directiva albinegra, que vuelve al mercado para apuntalar una plantilla que estaba casi cerrada. Aún así, los linenses no quieren precipitarse sino ir con pies de plomo para dar en la diana en dos puestos que se consideran importantes para afrontar con las máximas garantías una nueva temporada en Segunda división B.

Dos victorias sin contuntencia ante Cortijillos, de Regional Preferente (0-1), y San Bernando, de Primera Provincial (0-2), y una derrota por 4-1 ante el Atlético Tetuán, de la Primera marroquí, han provocado que en la Balona se pongan las pilas y considera oportuno dar un plus a la plantilla con dos refuerzos más. Para eso precisamente están las pretemporadas.

El entrenador de la Balona, Rafa Escobar, ha enviado con sus decisiones en sus primeras alineaciones de pretemporada varias señales al presidente con respecto al lateral derecho. No sólo lo ha hecho al no alinear como titular al canterano Iván ni en Marruecos ni en Los Cortijillos sino también colocando en esa posición a Alberto Merino, habitual en las últimas temporadas en el centro del campo. Una forma de decir que hace falta un zaguero en ese costado.

La esperanza del club para el lateral diestro era Francis Muñoz, exbalono del Cádiz, pero la rehabilitación del defensa linense no va todo lo rápida que desea jugador y club. No hay que olvidar que tiene un edema óseo, que es una lesión delicada. La entidad casi da por hecho que no estará para el comienzo de Liga y sí quizás para el mercado invernal. El club sigue ejercitándose a las órdenes de Escobar.

Para esa posición han llegado muchos ofrecimientos a las oficinas del Municipal este verano. Entre ellos, está el de Samuel Tomillero, jugador sub-23 del Villareal C (Tercera división) hijo de linenses, que tiene familia en la ciudad y que ha jugado anteriormente en el Huracán y en los juveniles del Sant Jordi, Torrellano y Eivisa. De momento, lo que hay es que el jugador -o su entorno- se ha ofrecido a la Balona, que no quiere precipitarse a la hora de firmar.

Algo similar pasa con el centrodelantero. El sistema de juego de Rafa Escobar, que tantas alegrías ha dado a los balonos, necesita un '9', un killer que haga olvidar la marcha de David Hernández. Es otra de las cosas que ha quedado patente en los primeros encuentros de pretemporada, en los que la Balona ha realizado cuatro tantos, tres ante dos equipos de inferior categoría y uno de penalti en Tetuán. La dirección deportiva baraja una larga lista de posibles atacantes para incorporar a la plantilla linense pero, como ocurre con el lateral derecho, va con mucha precaución. Sobre todo, después de dos fichajes frustrados este verano como son los casos de Ramiro y Adri.

Todo hace pensar en un sub-23 aunque si sale algún jugador de más edad podría llegar otro de esa condición.

La Balona está a tiempo, la pretemporada está para eso, para ver qué puede necesitar un equipo durante la Liga, perfilar la plantilla y acudir a un mercado que sigue muy vivo para jugar con máximas garantías.